5 maravillas que marcan la vida del cubano en Canadá

Allá en Cuba, cuando yo decía ‘me voy pa’l Norte’ yo me refería a Miami. Pero o mi brújula estaba rota o mi avión no tenía frenos, porque cogió tan para el norte que por poco llego al Polo. Pero yo no estoy sola. Aquí en Canadá hay cantidad de cubanos con brújulas rotas y aviones sin frenos. Viven aquí hace siglos y a algunos hasta le gusta.

Yo, por razones que un día les diré en otro blog, llevo aquí 10 años. Y por ese tiempo, cada vez que regreso a Cuba, mis amigos siempre me preguntan “y como es aquello?

Y con lo positivo que somos los cubanos, no faltaba más que enfocar la respuesta en las5 maravillas que marcan la vida de un cubano en Canadá, que a mi parecer, son éstas:

1- El invierno: No podemos hablar de Canadá sin obviar sus dos principales estaciones: el invierno y julio. Dicen los canadienses que son cuatro estaciones pero por mucho que yo las cuento, nunca llego a 4. El invierno empieza en agosto, pues como dicen en Cuba ‘empieza a soplar el mono’. Se siente así como una entrada de frente frio allá en la isla: el friesito, la lloviznita, la chaquetica. Ya para el 15 de a agosto ve buscando abriguito bueno que el mono se instala de a lleno frente al país y para Septiembre ya esta soplando bastante feo.

Pero justo en esa época empiezan a cambiar los colores de los árboles lo cual te desvía la mente un poco del frio. Por dos semanas tanta belleza natural te hace sentir que vives en un sueño. Mientras más frio hace más dramáticos se hacen los colores de los árboles y por ende, más lindo se te hace el sueño.

Justo después, parece que en lugar del mono ponen a un orangután pues el animal sopla con tantas ganas que a los árboles se le caen toditas las hojas. La ciudad se queda pelada. Los canadienses se ponen a recoger hojas. Los cubanos no recogen nada, si acaso barren la entrada de su casa.

Luego de lo que, Octubre enfría, Noviembre tulle, Diciembre pela, Enero congela y para Febrero ya se te acabaron los verbos.

Este año hubo un fin de semana de Febrero donde orgullosamente el periódico anunció que Canadá había marcado las temperaturas más frías del planeta. Mira tú que orgullo sentimos todos los cubanos aquí arriba. En Ottawa, la aguja del reloj se pegó en los -20 como con si le hubieran echado cola loca por 3 semanas. Un día había -22C con tanto viento y humedad que se sentía a -34C

-“34C!?” Me preguntan mis amigos allá en Cuba. “Cómo se siente eso?”

Y aquí les va el experimento que diseñé yo misma para mis amigos, por si quieren sentir un pedacito de Febrero de Canadá en su casa.

• Vaya a la cocina.
• Métase en el congelador de su nevera (que normalmente marca unos -10C)
• Quédese allí 10 minutos.
• Salga si puede.
• Multiplique lo que sintió cuando estaba metido allá dentro por 3.

Y esa es la vida de uno aquí, pero no por 10 minutos, sino por casi todo Febrero.

Además que, nieva a borbotones. A final de Febrero afuera de tu casa hay tales montañas de nieve, que al entrar a casa te sientes como una ardilla entrando a su cueva.

Para ir a bailar en invierno hay que pasar por una logística difícil, cosas como por ejemplo: hay que llevar zapatos para bailar y zapatos para la nieve, ponerse abrigos de cosmonautas con el vestidito fino de bailar abajo. Además hay que llevar pico, pala y escoba para cuando salgas de bailar desenterrar el carro de debajo de la nieve e irte a casa. Se pasa trabajo, pero se logra.

Dice la gente que la nieve es bella. Y yo digo que es preciosa, pero en una postal.

2- El deporte favorito: Para pasar el tiempo los canadienses dicen que esquían. Aparte de lo caro que es, la gracia de esquiar es tirarse de una cubierta de nieve para abajo y dice que tal aprieto pasas que así sudas. Y puede que los haya, pero yo no conozco un cubano en este país que esquíe. Yo lo traté una vez y di tanto gritos y vueltas loma abajo que llegué al pie de la loma que parecía una croqueta empanizada en nieve. Me levante con el orgullo que se levantan los cubanos y mi hijo que es medio canadiense no me hablaba de la vergüenza. No regrese a esquiar más nunca.

Los cubanos y los osos de este país nos parecemos en una cosa, y es que durante el invierno, invernamos.

Dicen mis amigos cubanos que yo soy de las más aventureras porque tengo un jacuzzi fuera de casa y allí me meto a descongelarme casi todas las noches. Además, que como mi hijo es pescador, compré una casita para pescar sobre un lado congelado.

Puede que sea la única cubana en Canadá que tenga una casita en el hielo, pero no soy la única cubana que pesca en el hielo. Allá me llevo a mis amigas y amigos cubanas de pesca. Bueno, de pesca y fiesta. Y no en ese orden. La casita tiene una estufa que calienta tanto que puedes pescar en tu bikini allá adentro. Se pone tan caliente eso que yo aun no me explico cómo es que no descongela el lago.

Tengo también una amiga cubana que aunque sea una vez en el invierno va al Rideau canal de Ottawa, la pista de patinaje hecha por el hombre más larga del mundo, y allí patina en el hielo. Tengo otra amiga que de tradición todos los años va con sus hijos a ver el festival del hielo que celebrant siempre en Ottawa, a ver las lindas esculturas y a tomarse un chocolate caliente.

Pero por lo demás, que yo sepa, los meses en que el frio aprieta, los cubanos invernan. Por lo que invernar, es el deporte favorito que practican los cubanos durante el invierno.

3- Los tulipanes: Después de la gran congelación llega Marzo que es un eterno ‘fangalete’, pues el país de pronto sedescongela y casi todas las ciudades están llena de charcos rodeados de nieve sucia y un granizado negro cubre las aceras.

Aun así, sientes la alegría generalizada de la gente porque les toca salirse de las cuevas y te dicen que están felices porque ya casi llega la primavera. Hasta los cubanos se alegran.

En Marzo los bulbos de tulipanes que sembraron en octubre del año anterior, se despiertan y empiezan a asomarse a los jardines. Es una tradición canadiense hacerle un festival a los tulipanes a mitad de mayo pues es cuando una millonada de ellos cubren muchas de las ciudades. Los siembran con un tremendo arte para hacer línea de colores con ellos, embelleciendo parques y jardines fuera de todos los aposentos. Es una belleza!

Pero como todos lo bueno en Canadá dura solo dos semanas, ya para el final de mayo lo que quedan son una millonada de flores muertas. Es ahí que se acaba la primavera.

En tanto llega junio anunciando que el verano empieza. El mono se empieza a quedar dormido pero hay noches de junio que se despierta. Enfría un poco y al otro día a lo mejor calienta.

4- El día de Canadá: Un día te despiertas y notas que finalmente llegó Julio, y dos días después es el día de Canadá y los Canadienses vestidos del blanco y rojo de su bandera van de fiesta. Tú te apuntas porque cubano al fin a ti te gusta la fiesta, muchos en vez de la bandera canadiense salen a las calles con la cubana. A festejar el día de cuba que no es el 2 de Julio pero dice el cubano que si no es de cuba no hay fiesta. Así todo, los canadienses no protestan. Porque una maravilla que tienen los canadienses es que no protestan y si tú los empujas te piden disculpa. Así que ese día de seguro los cubanos van de fiesta. Hasta las 10 de la noche pues es la hora de los fuegos artificiales, que son una belleza.

Yo fui a los del 2014 a ver los de Ottawa detrás del parlamento, que se supone son los mejores de todo el país. Justo antes que empezaran los fuegos empezó una lloviznita fría que parecían agujitas que te caían en la cara. Nos guarecimos bajo un árbol a ver los fuegos. A pesar de las agujitas, el show fue una belleza.

5- Las playas: En Julio, casi todos los cubanos de Ottawa juegan baseball. Yo no. Yo aprovecho para ir bastante a la playa. Y cuando digo playa necesito que te abstraigas, pues como Ottawa no tiene mar, realmente no debería haber playa.

Pero si las hay. Si te abstraes bien, la arena amarilla morcilla puede parecerte blanca, el agua de rio ‘azul negrusco’ puede parecerte turquesa. Y con una cirugía de cerebro total, puede sentirte en el mismísimo Varadero.

Con la única diferencia que, como en Canadá no te dejan tomar alcohol en las playas, es un Varadero sin cerveza.

Por Jocy Medina