El túnel de la Bahía de La Habana tendrá limitada la circulación este miércoles a partir de las 9:00 am debido a labores de mantenimiento en sus viales.
La Comisión Provincial de Seguridad Vial de la capital informó a los usuarios que se aplicarán medidas de regulación del tránsito en el corredor.
Las obras comenzaron el martes, por lo cual el tráfico en el túnel, el mayor de Cuba, lleva dos días afectado.
La información no da más detalles acerca del trabajo de mantenimiento.
La entidad orienta a los conductores estar atentos a las señalizaciones de los agentes y extremar las medidas de precaución para evitar accidentes.
El túnel de la Bahía de La Habana, que conecta La Habana Vieja con el este de la ciudad, permite el paso de unos 32 mil vehículos cada día.
Sin embargo, con frecuencia el tránsito se ve afectado por las inundaciones en épocas de lluvia, o por reparaciones debido a su deterioro, su proximidad con el mar y su antigüedad.
En abril pasado, el túnel se quedó a oscuras por labores de mantenimiento que obligaron a cortar el fluido eléctrico de sus luminarias entre las 9:00 am y las 4:00 pm.
Las autoridades hicieron "un llamado para que los usuarios extremen las medidas de precaución", ya que el tránsito por el interior no se interrumpió durante las labores constructivas.
En julio de 2022, un taxi estatal sufrió un aparatoso accidente luego de que el conductor resbalara y perdiera el control del vehículo como consecuencia del agua acumulada en el túnel, donde las autoridades no pusieron ni siquiera una señal de tránsito que alertara a los choferes del peligro.
El auto, marca Lada, sufrió daños fundamentalmente en la parte trasera, afortunadamente no se reportaron heridos ni fallecidos.
Imágenes compartidas en Facebook por un testigo, mostraban los preocupantes volúmenes de agua que cubrían la vía del túnel y dificultaban el tránsito seguro, así como una larga fila de carros luego del accidente a la entrada del pasadizo.
El túnel de La Habana posee cuatro sendas de ida y vuelta y está basada en un método de tubos de hormigón reforzado, capaces de aguantar la fuerza de miles de toneladas de agua marina.
Con una longitud de 733 metros, una profundidad de 12 a 14 metros, el tránsito de un extremo a otro tarda unos 45 segundos a 60 kilómetros por hora, cuando el tráfico se comporta con normalidad.
Considerado una de las siete maravillas de la ingeniería civil en Cuba, fue inaugurado el 31 de mayo de 1958, construido por la compañía francesa Societé des Grands Travaux de Marseille, con un costo de unos 30 millones de dólares. Su ejecución duró unos 32 meses.
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