Un hombre de 47 años y de nacionalidad cubana fue detenido en la madrugada del sábado al domingo por agentes de la Policía Local de Ferrol. El motivo era que había robado minutos antes un autobús de línea de la compañía Alsa aparcado en la estación municipal. R.M.R.B. se coló en la dársena de la estación de autobuses y logró acceder al interior del vehículo. «Escogió el más bonito y el más nuevo», comentaban ayer fuentes de la compañía. Se trataba de uno de los últimos convoyes adquiridos, este mismo año, por la firma asturiana. Realizaba el servicio entre Galicia y Madrid y el domingo lo iba a llevar un conductor hasta A Coruña para realizar la línea desde esa urbe hasta la capital del país. Pasadas las seis de la mañana, encontró el escondite de las llaves y puso el motor en marcha. No obstante, aunque algunas fuentes apuntan a que debía tener nociones de conducción de este tipo de vehículos, causó varios daños, tanto a ese autocar como a uno que estaba aparcado en el andén contiguo, de la empresa Arriva. Una vez que logró enderezar la marcha, se dirigió a la rampa de entrada en la estación y abandonó el inmueble. No obstante, al salir a la calle se encontró de lleno con los árboles de la estación y destrozó buena parte del bus. A partir de ahí, se le perdió la pista hasta que la Policía Local recibió una llamada alertando de que un bus en mal estado y con un conductor sospechoso circulaba por la carretera de Catabois. Tres patrullas salieron en su busca, y finalmente lo encontraron en el camino del Paredón, en Santa Mariña. En el momento de la detención, el conductor ocasional dijo a la policía que era el conductor de la ruta entre Ferrol y Santiago. Al mismo tiempo, los agentes localizaron al conductor habitual, le informaron sobre lo sucedido y le instaron a recoger el autocar. Fuente: La Voz de Galicia
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