Los procesos legales en Guantánamo pasan por un nuevo episodio con
la retirada de cargos contra cinco detenidos, después de que el fiscal alegara
que el Gobierno había ocultado pruebas favorables a la defensa. Los cinco presos
en cuestión, que permanecerán también encarcelados, estaban acusados de
pertenecer a la red terrorista Al Qaeda, aunque a ninguno de ellos se les
imputaba haber sido un cabecilla.
La supresión de los cargos deja en 16 el número de presos contra
los cuales el Pentágono mantiene una acusación formal, de los 272 que permanecen
detenidos de forma indefinida en la cárcel a orillas del Mar Caribe de la base
estadounidense en Cuba.
La retirada de los cargos supone otro capítulo en el embrollo legal
en el que han estado inmersas desde su creación las cortes anti-terroristas
establecidas por la administración del presidente de EEUU, George W. Bush, para
juzgar, según reglas especiales, a los encarcelados en Guantánamo. Llega después
de que el fiscal en esos casos, el teniente coronel Darrel Vandeveld, afirmara
en una audiencia este mes que el Gobierno había ocultado a la defensa pruebas
que ayudaban a sus clientes, las cuales tendría la obligación de revelar en un
proceso legal normal.
Vandeveld denunció entonces que el sistema judicial alternativo de
Guantánamo negaba al acusado "los derechos procesales básicos y sujetaba a
cualquier fiscal bien intencionado a alegaciones de violar la ética"; una
situación que le llevó a dimitir, convirtiéndose en el cuarto fiscal en
abandonar el puesto en protesta desde la creación de las cortes.
El Gobierno ha respondido con una defensa encendida de ese sistema
legal, a través de la portavoz presidencial, Dana Perino. "El proceso garantiza
un nivel muy grande de justicia, justicia que esas personas nunca habrían
recibido en su propio país".
El Pentágono no ha explicado por qué ha retirado los cargos contra
los cinco detenidos. No obstante, el comandante J.D. Gordon, un portavoz, hizo
una referencia a la salida de Vandeveld. "El fiscal jefe, el coronel del
Ejército Lawrence Morris, recientemente nombró nuevos equipos de fiscales que
revisarán todo el material disponible, coordinarán con las agencias de
inteligencia y recomendarán las acciones apropiadas en cada caso".
Nuevos
cargos
Gordon ha subrayado que el Pentágono tiene la opción de plantear
los cargos de nuevo en el futuro. Eso es precisamente lo que hará por lo menos
con el detenido de mayor relevancia del grupo, el egipcio Binyam Mohamed, según
ha confirmado su abogado, Clive Stafford Smith, que ha calificó la decisión de
retirar la acusación como "una farsa". "Las Fuerzas Armadas nos han informado de
que planean presentar cargos contra él dentro de un mes, tras las elecciones"
presidenciales del 4 de noviembre, ha asegurado Smith. El letrado ha revelado
que Mohamed se encuentra en aislamiento y que se ha planteado suicidarse.
El Pentágono acusó a Mohamed, que cuenta con residencia legal en
Reino Unido, a donde llegó cuando tenía 15 años, de conspirar con José Padilla
para la detonación de una bomba radiactiva en Estados Unidos. Mohamed afirma que
confesó su participación en ese complot durante torturas en Marruecos.
Además de Mohamed, el Pentágono también retiró los cargos contra
Noor Uthman Muhammed, supuestamente uno de los responsables de un campo de
entrenamiento de Al Qaeda, y Sufyiam Barhoumi, Ghassan Abdullah al Sharbi y
Jabran Said Bin al Qahtani, detenidos a la vez mientras preparaban presuntamente
bombas para ser usadas contra las fuerzas estadounidenses en Afganistán.
Fuentes: Sur.es
¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:
editores@cibercuba.com
+1 786 3965 689