| 24/11/2008 - 6:32pm (GMT-4)
Largo suele ser el camino entre el proyecto, la producción y la
exhibición al gran público de los audiovisuales de temática social,
trascendió durante la Primera Muestra Temática del Festival del Cine
Pobre de Humberto Solás, que sesionó del jueves al domingo en la ciudad
de Cienfuegos, 256 kilómetros al este de La Habana. "El documental busca las heridas de la sociedad para que
cicatricen, para que se encuentre una solución y esa herida cierre,
pero si no provocan el conocimiento, la reflexión y debate colectivos,
la búsqueda de soluciones, una se pregunta: ¿y de qué valió tanto
sacrificio?", dijo Vega a IPS. Así ocurre también con obras cubanas y extranjeras que tratan
a fondo temas como los estereotipos de género, la violencia hacia las
mujeres, la diversidad sexual, el estigma y la discriminación contra
las personas portadoras de VIH, causante del síndrome de
inmunodeficiencia adquirida (sida) y que, por lo general, se proyectan
sólo en muestras y festivales y llegan apenas a pequeños grupos. Por el contrario, es usual ver en las pantallas de la
televisión nacional telenovelas o spots que tocan estos temas, pero se
quedan en la superficie, no profundizan en las causas ni en las
consecuencias y, en muchos casos, legitiman los mismos patrones
patriarcales que, aparentemente, pretendían combatir. "No hay una política informativa de los medios en el
tratamiento y el enfoque de estas temáticas. Más bien hay una falta de
conciencia de lo importante que son para el desarrollo de nuestra
sociedad", dijo Vega, para quien, aunque reconoció que algunos de estos
temas ya no son del todo invisibles, su abordaje sigue siendo aleatorio
y asistemático. Cuando se hacen los materiales para la televisión "no se
tienen en cuenta las condiciones socio-económicas que hacen que una
persona se infecte con el VIH, ni el papel que pueden jugar las
exigencias del grupo. La gente no se siente reflejada", aseguró Carlos
Aragonés, coordinador del no gubernamental Grupo de Prevención del
Sida. "Tenemos que hablar de las personas que se encuentran en una
esquina y tienen sexo como sea, como pueden y con quien sea. Los medios
tienen que mover el piso", dijo Aragonés durante uno de los debates de
la muestra temática que, entre otros temas, incluyó sesiones sobre
migración, violencia de género, masculinidad, diversidad sexual y
pobreza. La muestra rindió además homenaje al cineasta cubano Humberto
Solás quien, al morir el 17 de septiembre, dejó algunos de los más
importantes personajes femeninos de la cinematografía nacional en una
obra aún poco estudiada y conocida, según los críticos Joel del Río y
Rufo Caballero, asistentes al foro sobre la mujer en el cine de Solás. Pensada como un "complemento" del Festival Internacional del
Cine Pobre, que se realiza anualmente en la oriental ciudad cubana de
Gibara, el encuentro intenta "desarrollar un espacio profesional" que
garantice "el intercambio constante" entre especialistas y creadores,
aseguró su director Sergio Benvenuto. "No se trata de decirnos cómo debemos escribir sino de
madurar las ideas para no caer en la trampa o no llegar o pasarnos",
comentó a IPS Salvador Miló, autor de un guión sobre las consecuencias
que puede tener "el machismo hegemónico entre personas del mismo sexo",
en el caso específico de dos niños que sufren el maltrato de otros
niños. El proyecto de Miló fue seleccionado para participar en un
taller de guiones, que funcionó paralelamente a los debates, con la
participación del director cinematográfico Enrique Pineda Barnet, la
presidenta de la Cátedra de la Mujer de la Universidad de La Habana,
Norma Vasallo, y la profesora del Instituto Superior de Arte de Cuba,
Danae Diéguez. Además de propiciar un encuentro entre dos mundos
generalmente separados, la ciencia y el arte, el festival del Cine
Pobre pretende con el taller de guiones tener una incidencia real en la
preparación de nuevos proyectos audiovisuales de contenido social y
contribuir a la búsqueda del financiamiento necesario para su
realización. El enfoque de las obras, una de las aristas tratadas en cada
sesión, devino en un debate sobre la relación entre la libertad y la
responsabilidad social del arte, al analizar el texto de algunas
canciones y espacios televisivos, incitadores de la violencia hacia las
mujeres o portadores de mensajes racistas y homofóbicos. "Todos y todas tenemos una responsabilidad y podemos
aportar. El artista podrá tener la libertad de hacer la letra que
quiera, pero nosotros tenemos que tener la libertad de criticarla",
dijo Julio César González Pagés, coordinador de la Red Iberoamericana
de Masculinidades. A partir del análisis de un documental del realizador Félix
Zurita, una denuncia contundente de la violencia de género en
Nicaragua, el historiador cubano analizó cómo el abordaje humorístico
de determinados temas, como la diversidad sexual o la discapacidad,
legitima la violencia y la discriminación. "Se está empezando a tratar la diversidad sexual en los
medios, pero la transexualidad y el travestismo siguen ausentes y,
cuando aparecen, salen siempre en negativo", indicó a IPS Olivia Lam,
transgénero en proceso de diagnóstico como transexual por una comisión
vinculada al estatal Centro Nacional de Educación Sexual (Cenesex). "No se llega al punto necesario para que la gente nos
entienda. Cuando más se pone un travesti en situación de burla o como
violador en una serie policíaca, nos encasillan y nos juzgan a todas
por igual", comentó a IPS Diana Padilla, una de las participantes junto
a Lam y varios especialistas en la mesa sobre diversidad sexual de la
muestra audiovisual. Padilla es una de las entrevistadas en el documental. "ELla
trabaja", una obra del realizador Jesús Miguel Hernández que cuenta la
historia de un grupo de travestis cubanas, el apoyo que desde hace
varios años reciben del Cenesex y su lucha por encontrar un espacio que
les garantice su inserción en la sociedad como ellas eligieron ser. Estos temas tienen que abordarse "de una manera realista, sin
dobles tintas, no de forma timorata o superficial", comentó a IPS el
sicólogo Alain Darcout. "En el caso del arte, lo formal no puede perjudicar el
contenido", añadió Darcout, especialista de educación y medios de
comunicación del Palacio de la Salud de la ciudad de Cienfuegos. Fuente: IPS