Una influyente revista francesa le dedicó elogiosos comentarios y en abril fue elegido Talento de Jazz 2011, pero el joven pianista cubano Harold López-Nussa se siente todavía lejos de la fama. Francia me ha dado más visibilidad internacional, sin embargo pienso que estoy en una etapa de comienzo en mi carrera, dijo en exclusiva en París con Prensa Latina el benjamín de los jazzistas de un país donde pululan los pianistas de alto vuelo. El lauro concedido por la Adami, la asociación francesa de la música similar a la SGAE de España, le ha permitido al mozalbete del clan de los López-Nussa actuar en numerosos festivales y clubes importantes de Europa. Junto con mi trío (que integran además su hermano Ruy Adrián López Nussa en la batería, y Felipe Cabrera en el bajo), el domingo me presento en el Festival de Jazz de París-Parc Floral en Vincennes, y luego en el encuentro de Juan-les-Pins, adelantó. Luego de experiencias alentadoras también en Suiza, España, Italia, Alemania, Noruega y Holanda, regresará a Cuba para acompañar a la diva del Buena Vista Social Club, Omara Portuondo, el 17 de agosto, con quien ya trabajó el pasado año. Aprovechará su estancia en La Habana para terminar la banda sonora de la película Fábula, de Lester Hamlet. Acto seguido irá a Colombia a otro Festival de Jazz en septiembre y para terminar ese mes, una pequeña gira por Cuba. Sobrino de Hernán López Nussa, uno de los grandes pianistas del jazz en la isla caribeña, el prometedor músico recalcó a Prensa Latina que si bien está satisfecho con los progresos experimentados, necesito aprender mucho más. De formación clásica que arrancó en el Conservatorio habanero Manuel Saumell, siguió en el Amadeo Roldán y terminó en el Instituto Superior de Arte de Cuba, admitió que necesita tiempo libre para enriquecer sus conocimientos. No puedo tampoco desaprovechar las oportunidades que se presentan, como el haber tenido entre los colaboradores del trío al puertorriqueño David Sánchez, un saxofonista formado en estados Unidos que nos aportó bastante, destacó. Antes de marcharse a Cuba, el joven tecladista de 28 años tiene en cartera otros compromisos que cumplir en Francia, en Avignon y Marciac, y en Italia y Alemania. Fuente: Prensa Latina
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: