APP GRATIS

Tras la destitución Dilma Rousseff en Brasil ¿qué les espera a los médicos cubanos presentes allí?

Quizás, el nuevo gobierno de Temer de por finalizado el programa Mais Médicos, que se estableció bajo el gobierno de Dilma Rousseff.

Medicos cubanos en Brasil Foto © Cubadebate

Este artículo es de hace 7 años

¿Qué sucederá ahora con los médicos cubanos que se encuentran en Brasil?

Esa pregunta, ahora mismo, está rondando por la cabeza de muchos.

Algunos especialistas aseguran que el nuevo gobierno, consciente de la necesidad de la presencia de los galenos cubanos en regiones del país en las que los colegas brasileros no van - no por el salario, sino también por la lejanía, la peligrosidad y las malas condiciones de vida -, pudiera presionar para que en la Cámara sea aprobada una medida provisional que extienda, al menos por otros tres años, la presencia de los doctores del llamado plan Mais Médicos.

Del mismo modo, existe una fuerte preocupación sobre el futuro del programa, y no solo son médicos cubanos los que se encuentran en Brasil formando parte de este plan.

Son más de 7000, pero los hay portugueses - también, por ejemplo -, pero sí, la mayoría son cubanos. Algunos incluso, han perdido la vida trabajando en tierras cariocas. Otras - mujeres - han sido violadas, pero nadie se ha ido, a pesar de la violencia, de la desestabilización social, y si uno se guía por las imágenes de las Olimpíadas de Río 2016, en que cada vez que un cubano "subió a combatir" (hablo de lo que ví, en la lucha greco y libre, en el judo y en el boxeo) eran abrumadoramente aplaudidos y respaldados por la multitud presente en las tribunas.

Parar el plan Mais Médicos, sacar a los más de 7000 médicos presentes en Brasil, o incluso "sacar a los cubanos", aseguran algunos, puede ser un desastre.

La medida debería ser aprobada por el Senado, y hasta ahora, no ha habido objeción a mantener autorizados a los médicos extranjeros, para que continúen ejerciendo la profesión en el país, sin revalidación de sus diplomas.

El problema, estaría dado en la disposición de la parte cubana, con relación a un acuerdo que se firmó por la gestión e impulso de la propia Dilma Rousseff.

El Gobierno de Raúl Castro está pidiendo, por ejemplo, un aumento del 30% en el pago que recibe por cada médico - en la actualidad alrededor de US $10.000 - algo muy complicado, en los momentos de recortes financieros que vive la nación carioca.

Por otra parte, y sobre todo, la situación política ha cambiado, porque ya las afinidades ideológicas entre los dos gobiernos no es la misma.

Brasil - el gobierno - incluso, si quisiera, pudiera comenzar a favorecer la dimisión de los médicos cubanos, que se comenta, muchos, no quieren regresar a Cuba.

En todo caso el futuro es incierto, tanto como las relaciones futuras entre Brasil y Cuba, pero sobrados ejemplos de disposición a permanecer "con las maduras" tienen los profesionales de la salud cubanos.

Fueron de los primeros en decir presente cuando los sucesos del Katrina; fueron de los primeros y de los más eficaces, en la lucha contra el cólera en Haití; también fueron de los primeros en llegar a Pakistán cuando el atroz terremoto y de "los últimos en irse". Y por último, estuvieron en "la línea de fuego" contra el Ébola en África.

Así que el nuevo gobierno interino de Temer tiene una buena oportunidad de demostrar "a que viene". Si es capaz de apartar a un lado, sus diferencias ideológicas, y pensar en su pueblo, pues creo, habrá allí, galenos extranjeros para rato.

¿Qué opinas?

COMENTAR

Archivado en:

Artículo de opinión: Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de CiberCuba.


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689


Esta Web utiliza cookies propias y de terceros, para mejorar la experiencia de usuario, recopilar estadísticas para optimizar la funcionalidad y mostrar publicidad adaptada a sus intereses.

Más información sobre nuestra política de privacidad.