La Empresa estatal de Telecomunicaciones de Cuba (ETECSA) anunció este lunes ―a través de los medios oficiales de la Isla― que ampliará el acceso a internet en los hogares cubanos. El gobierno no ha precisado para cuándo está previsto que la conexión a internet desde las viviendas esté disponible en todo el país, y ni tan siquiera en qué momento lo estará en cualquier hogar de la capital, pues de momento solo se implementará, como prueba piloto, en dos consejos populares de La Habana. Los cubanos miran con ilusión la posibilidad de dejar de hacer públicas sus conversaciones en un parque y llevarlas a donde deben estar: la intimidad de sus casas.
No obstante, no ha precisado la entidad, lo que siempre hace temblar a los cubanos: el precio. Acostumbrados a ver reformas a cuentagotas, los cubanos están reaccionando con alegría a esta noticia: la que dicta el sentido común; pero también con cautela, pues un precio elevado pondría, una vez más, el dedo en la llaga: el bajo poder adquisitivo real del llamado “cubano de a pie”.
El gobierno ha puesto en marcha, hace meses, cincuenta y ocho puntos de acceso wifi para que los ciudadanos accedan a internet en todo el país, además de la creación de decenas de cafés de internet para el mismo propósito. Sin embargo, como era de esperar, el acceso limitado no se acerca a la satisfacción de la demanda.
ETECSA prevé también tener tres parques con wifi por municipio, llegar a otras zonas con gran afluencia de público ―y más adelante― a cafeterías, bares y restaurantes que lo soliciten.
Cambian los tiempos, o tal vez no tanto: “en cada barrio un comité y en cada municipio tres parques con wifi”…
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