Martha Escalona se encuentra postrada en una silla de ruedas pero, a pesar de sus grandes limitaciones, se esfuerza en enfocarse en la lado positivo de la vida.
“Mis piernas están postradas, pero mi mente vuela" declara Martha, quien considera que pese a sus discapacidad la vida le ha sonreído
Sin embargo, la escasa ayuda social que recibe, no le permite hacer frente a la compra de un sillón reclinable para poder descansar por lo que pide ayuda para hacer frente a este gasto.
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