Cuatro turistas estadounidenses y el piloto australiano de una avioneta fallecieron esta madrugada después de que la aeronave donde viajaban se estrellara cerca de un centro comercial de Melbourne.
Según los primeros informes policiales un "fallo catastrófico en el motor" poco después de despegar fue el detonante del accidente. Pese a que el piloto intentó regresar no pudo hacerlo y finalmente se estrelló.
Afortunadamente, el accidente se produjo antes de la apertura de Direct Factory Outlets lo que explica que ninguno de los empleados del centro comercial haya resultado herido.
"Al mirar la bola de fuego, es increíble que nadie estuviera en la parte trasera de esas tiendas o en el aparcamiento y que nadie resultase herido", declaró auxiliar de la policía, Stephen Leane.
Las autoridades confirmaron que el avión era un vuelo chárter comercial con destino a la isla en el estrecho de Bass. La aeronave, propiedad de Myjet, había sido contratada por Corporate and Leisure Travel.
Por el momento, el aeropuerto de Essendon y el centro comercial donde se produjo el accidente han sido cerrados para permitir investigaciones por el forense y la Oficina Australiana de Seguridad en el Transporte.
También han sido cerradas algunas carreteras cercanas donde cayeron algunos de los restos del avión.
Sin embargo la investigación, según explicó Douglas Drury, profesor de la aviación de la Universidad de Australia, será complicada: "porque el avión llevaba una gran cantidad de combustible, porque estaba comenzando un vuelo, por lo que hay mucho gas y mucho fuego".
Por su parte, el gobernador del estado de Victoria, Daniel Andrews, declaró que este es el mayor accidente de la aviación civil en Victoria en los últimos 30 años, y elogió el trabajo del personal de servicio de emergencia que asistió a la escena.
Un taxista testigo del accidente declaró a ABC Melbourne: "Vi este avión llegando muy bajo y rápido. Fue justo detrás de las barreras, así que no pude ver el impacto, pero cuando golpeó el edificio hubo una bola de fuego masiva ".
"Podía sentir el calor a través de la ventana del taxi, y luego una rueda, parecía una rueda de avión, rebotó en la carretera y golpeó la parte delantera del taxi mientras estábamos conduciendo. Seguimos conduciendo y había una gran bola de fuego detrás de nosotros", añadió.
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