La situación que se vive en Colombia tras el desbordamiento de un río se ha convertido en una dramática carrera a contrarreloj por encontrar a los cientos de desaparecidos.
En las últimas horas las autoridades del país elevaron a 234 el número de muertos, mientras que los heridos se sitúan en 220, según 'El Mundo'.
Mocoa, capital del sureño departamento del Putumayo, es el epicentro de esta catástrofe originada por una avalancha, que fue causada por las fuertes lluvias.
Los últimos reportes de la Cruz Roja Colombiana (CRC) revelaron que hay 300 familias afectadas, 17 barrios con mayor afectaciones y 25 viviendas totalmente destruidas.
Hospitales colapsados y un paisaje desolador
Por el momento el Gobierno de Juan Manuel Santos ha habilitado una cuenta bancaria para que se puedan realizar donaciones económicas para ayudar a los damnificados.
El paisaje que se vive en el país latinoamericano es desolador, con coches boca abajo y basura embarrada donde antes habían casas.
"El hospital de Mocoa ha colapsado, tendremos que trasladar al resto de heridos a las poblaciones cercanas del Huila, Cauca y Nariño", aseguraba al citado medio el director general de Cruz Roja en el país, César Urueña.
Además la zona no tiene energía ni agua. "Estamos totalmente aislados, mi casa está destrozada, el barro está casi hasta el techo", afirmó el alcalde de la localidad, José Antonio Sánchez.
"Es prioritario recuperar a todos los desaparecidos. Entre el domingo y el lunes se completará el trasladado los muertos para enterrarlos según las creencias religiosas de cada uno. Es una operación muy compleja, hay más de 300 familias afectadas", añadió Urueña.
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