Jorgito nació en el municipio matancero de Cárdenas en 1986 después de un parto complicado en el que su madre sufrió un shock anestésico que ocasionó al bebé algunos problemas de salud, según relata un reportaje publicado por El Toque.
El niño requería terapias de rehabilitación pero en su provincia no había ninguna consulta destinada a este tipo de problemas. Sus padres-estomatóloga ella, pediatra de la Unidad de Cuidados Intensivos él- tenían que trasladarse continuamente a La Habana para atender a Jorgito.
"Fue entonces cuando el Dr. Jorge Rodríguez pensó que podían existir otros niños como el suyo, y otros padres, como él, necesitado de ayuda. Por ello, buscó el apoyo del Centro de Diagnóstico y Orientación del Ministerio de Educación para ofrecer consultas en sus horas extras. Como único personal contaba con su enfermera de terapia intensiva y un Licenciado en Cultura Física que le garantizaba la rehabilitación", relata el reportaje.
Dos décadas pasaron hasta que logró formar una institución con ayuda del Partido Comunista Alemán y en 2002 se fundó el Centro de Rehabilitación del Neurodesarrollo Rosa Luxemburgo, único de su tipo en Cuba.
"Treinta y un años después, Jorgito trabaja como archivista en el Centro. Es hipoacústico, tiene problemas en el habla y una memoria fotográfica increíble: conoce con exactitud las fechas y nombres de los niños que desde el 2002 allí se atienden. Niños que, como él, nacieron con factores de riesgo".
El Centro de Rehabilitación del Neurodesarrollo Rosa Luxemburgo atiende a casi 1000 niños y emplea a 60 trabajadores.
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