Miles de personas organizaron ayer una protesta en Bruselas contra el presidente de EE.UU., Donald Trump, que se encuentra en la capital belga para conversar con los líderes de la Unión Europea y para participar en una reunión de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).
Los manifestantes marcharon llenaron la plaza central de la capital belga, pocas horas después de que Trump arribara al país.
Con numerosas banderas de diferentes países ondeando y muñecos que imitaban al presidente norteamericano, los manifestantes coreaban: "Trump no es bienvenido".
La policía cifró el número de manifestantes en unos 9 mil. Los participantes en las protestas expresaron su molestia por las declaraciones previas, en las que Trump se refirió a Bruselas como un "infierno" arruinado por la inmigración.
La protesta de ayer miércoles se llevó a cabo bajo un estricto control de seguridad y no se registraron incidentes violentos.
El presidente de EE.UU. primero se reunió con el rey Felipe de Bélgica y con la reina Mathilde, y luego mantuvo conversaciones con el primer ministro Charles Michel.
Durante su campaña electoral, Trump criticó duramente a la OTAN, a la que consideró una alianza militar occidental de 28 miembros "obsoleta".
Denunció su ineficacia en la lucha contra el terrorismo, y se quejó de que otros miembros no contribuían lo suficiente al presupuesto de la OTAN.
Trump cambió luego su posición tras reunirse con el Secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, en la Casa Blanca.
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