Federica Mogherini ―alta representante de la Unión Europea (UE) para la Política Exterior― instó ayer al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, a "suspender" el proceso para una Asamblea Constituyente.
Mogherini advirtió que "todas las opciones", incluidas sanciones a Venezuela, están en este minuto sobre la mesa de la Unión Europea. En una rueda de prensa posterior al Consejo de ministros de Exteriores de la UE, Mogherini precisó: “Creemos que sería útil si el Gobierno (venezolano) buscase gestos políticos para bajar las tensiones, crear mejores condiciones para reanudar el trabajo hacia una solución pacífica negociada, y suspender el proceso de hacer una Asamblea Constituyente".
Y añadió: “Espero que el tiempo de ahora al 31 de julio pueda utilizarse sabiamente para buscar la unidad del país y evitar cualquier otra escalada”. Sobre el resultado de la consulta convocada el pasado domingo por la oposición venezolana, dijo que “muestra que hay una voluntad del pueblo de Venezuela de tener una solución urgente pacífica a sus dificultades, que son muchas”.
Por otra parte, Mogherini destacó que es importante que los países de la región se impliquen en la búsqueda de una salida a la crisis “con, por ejemplo, la creación de un grupo de amigos aceptado por ambos, el Gobierno y la oposición, para acompañar la negociación de una solución pacífica (...) la región es lo suficientemente diversa para ofrecer muchos participantes diferentes a ese grupo y estaríamos más que felices en apoyar tal proceso regional por todos los medios”.
La jefa de la diplomacia comunitaria admitió que la situación en Venezuela le "preocupa mucho", ya que "tenemos muchos ciudadanos con doble nacionalidad allí”.
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