Hasta Sitios 226, Centro Habana, llegó CiberCuba para conocer la historia de Yaineris Figueredo. Su esposo desde el año 2011 padece una enfermedad llamada esclerosis lateral amiotrófica (ELA), la misma que padeció hasta su muerte el científico británico Stephen Hawking.
Pero Yaneris no es la esposa de un hombre famoso, sino de alguien que no puede salir ni a tomar el sol porque las condiciones del lugar donde vive se lo impiden y la incapacidad de moverse de su pareja le obligan a estar postrado en cama.
“Paso mucho trabajo porque esto es chiquito”, nos cuenta mientras la cámara capta las diminutas dimensiones de lo que llama vivienda.
Nos cuenta que cada seis meses, cuando su esposo tiene consulta médica, debe pedir ayuda a los vecinos para sacarlo a la calle.
Esta cubana vive con sus dos hijas, menores de edad, por lo tanto la responsabilidad del hogar recae ciento por ciento sobre sus hombros. Sobrevive con una pensión que le paga el Estado cubano y solo eso. No puede trabajar porque se debe ocupar de su esposo los siete días de la semana.
Ante la curiosidad de saber qué tipo de ayuda recibe por parte de los asistentes sociales, Figueredo dice que la trabajadora social le comunicó que ellos no tenían ninguna persona asignada para esos casos.
“Los médicos vienen solo cuando le pasa algo”. Supuestamente deben ir dos veces al año según le dijo la doctora de su área de salud “pero ni eso”, lamenta Yaineris.
Esta mujer cubana solo pide un cambio de vivienda para poder sacar más a menudo a su esposo. Una casa que tenga un acceso más fácil a la calle, “aunque no tenga consulta, para que al menos coja sol”.
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