Hay muchos mitos alrededor de una bebida que a tantos les gusta como la cerveza. Muchos dicen engordar, pero los estudios han comprobado que el líquido tiene un bajo contenido calórico y por sus nutrientes algunos los incorporan como parte de una dieta saludable.
Según Román Martínez, profesor de la Facultad de Medicina de la Universidad Complutense de Madrid y presidente del Comité Científico de la Sociedad Española de Dietética y Ciencias de la Alimentación, “la cerveza es una bebida tradicional que, además de aportar ciertas sustancias nutritivas y no nutritivas, es fuente de agua para el organismo”.
Aunque su consumo debe ser responsable y moderado, como el de todas las bebidas alcohólicas, lo cierto es que en distintas etapas por las que transcurre el cuerpo femenino la cerveza puede ser también beneficiosa.
De acuerdo con investigaciones realizadas sobre los alcoholes poco fermentados como la cerveza en el Hospital Universitario de Mü- nich y el Hospital Universitario de Heidelberg, en Alemania, “esta promueve la secreción de jugos gástricos, facilita la digestión y estimula el apetito”.
Hay tres etapas en la mujer que, contrario a lo que creemos, la cerveza también puede resultar beneficiosa.
1- Etapa del embarazo y la lactancia
La cerveza sin alcohol proporciona ácido fólico, una vitamina esencial que disminuye el riesgo de malformaciones en la médula espinal. Además, mejora la capacidad antioxidante de la leche materna.
2- Etapa de la menopausia
La cerveza contiene fitoestrógenos naturales, los que, según estudios, pueden atrasar al menos dos años la menopausia en las mujeres.
3- Etapa de envejecimiento del cuerpo
Esta bebida contiene un ingrediente llamado lúpulo, con propiedades antibacterianas, antiinflamatorias, sedante, diurético, y con efectos anti envejecimiento en el organismo.
Está comprobado que el consumo moderado de cerveza también disminuye las infecciones en las mujeres. Un estudio realizado en adultos sanos por el Instituto del Frío del Centro Superior de Investigaciones Científicas, reveló que beber cerveza moderadamente durante un mes mejora el sistema inmunológico, especialmente en mujeres.
Muchas investigaciones exponen que, por los ingredientes contenidos en el líquido, es beneficioso para los huesos, protege de enfermedades como el Alzheimer, es bueno para la diabetes…
No obstante, hay que poner atención. Todo en grandes cantidades puede afectar. Así como el uso moderado de esta bebida puede aportar beneficios, el consumo indiscriminado también afecta el sistema inmune. Así que, ¡a consumir la dosis exacta!
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