Su principal manifestación es la aparición de manchas oscuras, gruesas y aterciopeladas en la piel. Esas manchas pueden aparecer en las axilas, la ingle, el cuello, los codos, las rodillas, los nudillos o los pliegues de la piel. Este trastorno también puede afectar los labios, las palmas de las manos y las plantas de los pies.
La aparición de las manchas pueden ser un signo de un problema de salud más grave, como la prediabetes. Los tratamientos más efectivos se centran en la detección y el tratamiento de la afección médica que origina el problema. Afortunadamente, las manchas tienden a desaparecer una vez que se trata la causa.
La acantosis pigmentaria afecta tanto a hombres como a mujeres. Es más común que afecte a personas con sobrepeso, a quienes tienen piel más oscura y a quienes padecen una afección diabética o prediabética.
La frecuencia de la acantosis pigmentaria varía según el grupo étnico y se presenta en la siguiente proporción:
• 1 por ciento de caucásicos
• 6 por ciento de latinos
• 13 por ciento de afroamericanos
• 34 por ciento de nativos americanos,
Todos los grupos étnicos corren el mismo riesgo de padecer acantosis pigmentaria cuando el índice de masa corporal (IMC) supera ampliamente el valor normal.
Las manchas oscuras de la acantosis pigmentaria se producen cuando las células epidérmicas de la piel comienzan a reproducirse rápidamente. Este crecimiento anómalo suele desencadenarse a causa de niveles altos de insulina en sangre. En casos poco frecuentes, el aumento puede ser provocado por medicamentos, el cáncer u otras afecciones médicas.
El agente desencadenante de este síntoma con mayor frecuencia es el exceso de insulina en sangre. Pues cuando se ingieren alimentos, el organismo convierte los carbohidratos en moléculas de glucosa. Una parte de esta glucosa se utiliza para proporcionar energía y el resto se almacena. Para poder usar la glucosa como fuente de energía es necesaria la presencia de insulina que es la que garantiza la entrada de la glucosa a las células.
Con el tiempo, las personas con sobrepeso tienden a desarrollar resistencia a la insulina y, si bien el páncreas produce insulina, el organismo no puede utilizarla correctamente. Esto genera una acumulación de glucosa en el torrente sanguíneo, que produce niveles elevados de glucosa en sangre y de insulina en el torrente sanguíneo.
Debido al exceso de insulina, las células normales de la piel se reproducen a mayor velocidad. En las personas que tienen piel oscura, estas células nuevas tienen más melanina, y por ello se produce una mancha en la piel que es más oscura que la piel que la rodea. Por ende, la presencia de la acantosis pigmentaria es factor de predicción importante de una diabetes futura. Si esta es la causa, es relativamente sencillo revertirla con un régimen alimentario adecuado, actividad física y control de la glucemia.
La acantosis pigmentaria también puede ser producida por ciertos medicamentos como las píldoras anticonceptivas, la somatotropina, los medicamentos para la glándula tiroidea o, incluso, ciertos suplementos de fisicoculturismo.
Todos estos medicamentos pueden provocar cambios en los niveles de insulina. Los medicamentos utilizados para aliviar los efectos secundarios de la quimioterapia también han sido asociados con la acantosis pigmentaria. En la mayoría de los casos, la afección desaparece cuando se suspenden los medicamentos.
En casos poco frecuentes, la acantosis pigmentaria puede ser causada por los siguientes factores:
• cáncer de estómago (adenocarcinoma gástrico)
• trastornos de la glándula suprarrenal, como la enfermedad de Addison
• trastornos de la hipófisis
• niveles bajos de hormonas tiroideas
• dosis altas de niacina.
Diagnóstico
Es sencillo reconocer la acantosis pigmentaria a simple vista. Es posible que el médico decida realizarle un análisis de resistencia a la insulina o de diabetes para corroborar si esa es la causa de origen. Entre estos análisis se encuentran las pruebas de glicemia o las pruebas de insulina en ayunas. Además, el médico también puede revisar todos los medicamentos que usted toma para comprobar si constituyen un factor que contribuye a la afección.
Es importante informar sobre los suplementos nutricionales, las vitaminas o los suplementos de fisicoculturismo que consume además de los medicamentos recetados.
Tratamiento
La acantosis pigmentaria no es una enfermedad en sí; es un síntoma de otra afección que puede necesitar atención médica. El tratamiento se centra, en gran medida, en abordar la afección de origen. Si usted tiene sobrepeso, el médico le aconsejará adelgazar. También es posible que le recete medicamentos para controlar el nivel de glucosa en sangre.
Si la afección es provocada por medicamentos o suplementos lo mejor será suspenderlos o sustituirlos. Por lo general, las manchas de piel con cambio de coloración desaparecerán si se identifica la causa de origen y se logra controlarla.
Tratamientos cosméticos
Existen tratamientos cosméticos para los casos en los que las manchas son muy antiestéticas o causan vergüenza. Las manchas oscuras pueden ocultarse con productos cosméticos o aclararse con productos recetados para aclarar la piel. Si bien estos tratamientos no son tan efectivos como el tratar la causa de origen de la afección, pueden proporcionarle algún grado de alivio. Entre los productos para aclarar la piel disponibles se encuentran la crema Retin-A, la urea al 20 por ciento, los alfahidroxiácidos y el ácido salicílico.
Prevención
Por lo general, si se mantiene un estilo de vida saludable, es posible prevenir la acantosis pigmentaria. Los pasos fundamentales son perder peso, controlar el régimen alimentario y, en algunos casos, ajustar los medicamentos que estén contribuyendo a la afección. Llevar un estilo de vida más saludable también ayudará a reducir los riesgos de tener muchas otras enfermedades.
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