Los bomberos de la ciudad de Prescott, Arizona, quedaron impactados al acudir a la escena de un aparatoso accidente automovilístico masivo en el que, por puro milagro, ninguno de los involucrados falleció o presentó heridas graves.
Un grupo de paramédicos acudió a la carretera Williamson Valley, a las afueras de Hollywood, para encontrarse con una imagen caótica: una camioneta que, de algún modo, terminó encima de un auto después de una colisión en la que participaran cuatro vehículos.
Según informó en un comunicado la Oficina del Sheriff del Condado de Yavapai, la mujer que conducía la camioneta dijo a los bomberos que manejaba hacia el norte cuando un camión negro que viajaba a su lado hizo contacto con ella, lo que le hizo perder el control.
La conductora contó que su carro giró hacia el carril contrario, donde chocó con un auto negro y este impacto causó que su camioneta se volcara por el aire, para luego aterrizar sobre un sedán rojo.
Había dos ocupantes en el sedán rojo, y uno en el carro negro y otro en la camioneta. Lo más notable, señala el comunicado, es que nadie resultó herido en este incidente porque “todas las personas involucradas llevaban sus cinturones de seguridad”.
“Este es el segundo accidente de esta semana en el que el uso de los cinturones de seguridad ha ayudado a evitar una tragedia y los bomberos quisieran recordarles a todos que el uso de este simple dispositivo salva vidas diariamente”, destacó la Oficina del Sheriff.
El camión negro que chocó contra la camioneta huyó de la escena. Las autoridades advirtieron que si alguien tiene información sobre el accidente deberá comunicarse con el Departamento de Policía de Prescott.
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