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05/03/2009 - 3:03pm (GMT-4)
En tan sólo un mes, en septiembre de 2008, los huracanes Gustav e
Ike devastaron parte de Cuba y derribaron 100.000 palmas reales, el árbol
emblemático de la isla que ahora servirá de materia prima para la reconstrucción
de unas 7.500 viviendas. Un proyecto de Intermón Oxfam pretende aprovechar la
madera de estos árboles gracias a la adquisición de máquinas cortadoras y
herramientas que les servirán a las cooperativas para poner en pie las zonas
rurales más afectadas por los desastres naturales. Esto será posible gracias a
la aportación del Ayuntamiento de Málaga y la Fundación Voces, que han
subvencionado con 15.000 euros este proyecto de cooperación. Parte de la
recaudación fue obtenida en el concierto solidario que el Consistorio y Chambao
organizaron el año pasado dentro de la Semana de las Culturas.
"Del
concierto que dimos en el Auditorio donamos un euro de cada entrada y luego
entre todos hemos reunido el dinero para ayudar a Cuba a reconstruir viviendas
de gente que se ha quedado en la calle", comentó ayer la cantante Lamari,
representante también de la Fundación Voces, que está abriendo su sede en
Andalucía para "echar una mano en el mundo que nos ha tocado vivir a todos, un
mundo que hay que cuidar más y mirarnos menos el ombligo", añadió la líder de
Chambao.
El proyecto, según Valentín Vilanova, director territorial de
Intermón Oxfam, ha procurado "hacer de la tragedia oportunidad". Se aprovecharán
45.000 de las palmas caídas y un total de 26.250 personas de zonas rurales de
las nueve provincias más afectadas por los huracanes contarán con un importante
insumo y un juego de herramientas que, además de ayudarles a reconstruir sus
hogares, les preparará para enfrentarse a nuevos desastres en el futuro. "Lo que
se vivió el año pasado en Cuba es un símbolo del impacto del cambio climático en
las zonas más deprimidas del planeta, cuando los abusos los hacen los países
ricos", comentó Vilanova, que agradeció la solidaridad malagueña.
Fuente: Malagahoy.es