Me dicen que soy el cónsul honorario de Galicia en Cuba

Eddy Jiménez (La Habana, 1947) ha conjugado su experiencia como periodista, profesor universitario y diplomático para plasmar en un libro, La revolución de los camaleones, su visión -en primera persona como representante del gobierno cubano en Bulgaria- de la caída de los países del bloque soviético. La versión en gallego de este texto acaba de ver la luz de la mano de la editorial Corsarias y Eddy Jiménez, defensor del socialismo guevariano, ha recorrido varias localidades gallegas para presentarlo. La más reciente, Allariz. -De Cuba a Galicia y de Bulgaria al gallego... Amplio recorrido! -Por primera vez un libro mío se publica en lengua gallega. Otros anteriores se tradujeron al portugués y éste mismo se editó en Brasil, en Portugal y en Chile, pero ninguno se había editado todavía en gallego. -¿Desde cuándo tiene ese vínculo con Galicia? -Es una historia curiosa. En el año 2001, a través de la Asociación de amizade galego cubana Francisco Villamil, fui convidado a dar unha charla en Galicia, como escritor invitado, para hablar de Cuba. El paraninfo de la Universidade de Vigo se llenó y la relación, poco a poco, se fue estrechando. Me dicen que soy el cónsul honorario de Galicia en La Habana. -La presentación de su libro en Allariz responde a ese nexo «consular» con varios vecinos de la localidad. -Sí, y aquí he conocido su historia. Todo el mundo dice que Allariz es precioso, pero lo más precioso de Allariz es su gente. Ellos fueron capaces de hacer una revolución local contra la derecha de la derecha. -Aunque el libro nos transporta a la caída del Este, sus charlas se centran en la realidad cubana. ¿Cuál es la situación del país hoy por hoy? -En 1968 adoptamos el modelo económico soviético; fue un gran error que ya advirtió el Che. Afortunadamente, no copiamos el modelo social y político; si no, habríamos caído también en el 89. Ahora tenemos que retomar el camino dejado entonces. Se han tomado medidas, como la apertura al trabajo por cuenta propia, pero nos queda poco tiempo para reanimar nuestra economía porque los que están haciendo esos cambios son la generación histórica de la revolución. Hemos tomado conciencia de que sin economía no hay socialismo. Tenemos un amplio desarrollo social y oportunidades para todo el mundo pero ¿con qué mantenerlo? -En Galicia, más allá de ideologías, hay una conexión especial con Cuba, ¿la percibe? -Así es y de ahí mi estrecha vinculación. Con Cuba hay un sentimiento especial y por eso, desde otra perspectiva y también para otros pueblos, tenemos la obligación de salvarnos porque Cuba es un referente y en América Latina el momento es de unidad. Fuente: La Voz de Galicia