APP GRATIS

El cambio de las Obama camino a Cuba

"Cambio" es probablemente la palabra más usada por todos los cubanos que desde hace más de un año seguimos atentos los detalles del "deshielo"

 ©

Este artículo es de hace 8 años

"Cambio" es probablemente la palabra más usada por todos los cubanos que desde hace más de un año seguimos atentos los detalles del "deshielo", esa otra palabra que oficialmente ha quedado para denominar el proceso de normalización de las relaciones entre los dos países y que afortunadamente se hace ya acompañar de "irreversible". Y es desde la percepción de cualquier señal o gesto por parte del mandatario estadounidense que apoye dicho cambio, que muchos hemos querido ver en la elección del vestuario de la primera dama y de sus hijas un guiño al acercamiento entre los dos pueblos, además del indiscutible carácter abierto, e informal que los Obama desean imprimirle a su visita a la isla.

Si desde hace unos días el Presidente no ha dejado de sorprendernos, su participación en el programa de Pánfilo y su continuo manejo de expresiones coloquiales cubanas nos muestran su perfil más cercano, esta vez ha tocado el turno a Michelle, quien después de abordar el avión presidencial, enfundada en un sobrio y encubridor abrigo negro a juego con sus altas botas decidió desembarcar en la Habana luciendo un veraniego vestido por las rodillas, sin mangas y que resaltaba su atlética figura. Firmado por la venezolana Carolina Herrera, la prenda, estampada con flores pixeladas, combinaba los colores patrios de las dos banderas : azul blanco y rojo. Un claro aviso desde el mismo momento que se abrió la puerta . El calzado escogido no pudo ser más sencillo: unas sandalias con un panel de ribetes negros que debieron haberle provocado más de un resfrío a sus desnudos pies mientras sorteaba los charcos de agua en su visita a La Habana Vieja.

Muchas eran las expectativas en torno al estilismo que elegiría la primera dama para tan relevante momento . Ya en el pasado nos asombró cuando escogió para la ceremonia de investidura de su marido en el 2009 un vestido de una de sus diseñadoras favoritas, la cubana Isabel Toledo (La Habana 1960) y en varias ocasiones ha mostrado también sus preferencias por los modelos de Narciso Rodríguez, nacido en Estados Unidos de padres cubanos. Por lo que tal vez se pensó que se decantaría por las creaciones de algunos de estos modistos. Sin embargo, la elección ha sido igualmente acertada por el mensaje de la prenda y por el origen de su creadora. Vestido que, dicho sea de paso, ya se ha agotado en la página web de la firma a pesar de su precio: 2.000 euros.

El frío clima de la base de Andrews también nos dejó imagenes de las hijas de Obama quienes llevaban un invernal oufit de viaje. Malia, vestida con un largo abrigo en tono rosa, combinaba unas botas estilo Chelsea con medias negras tupidas, mientras Sasha prefirió botas planas altas en color gris y un abrigo largo negro. En cambio, lejos de todo protocolo y formalidad, las dos chicas impactaron al descender la escalerilla por sus juveniles y cómodos atuendos, propios de cualquier adolescente, en especial Sasha, con unas snakers negras tipo Vans que le daban ese toque desenfadado y cómodo propio de su edad y muy de moda en la isla. Su hermana Malia, también dio ejemplo de frescura y juventud al optar por un vestido de flores que combinó con una de las sandalias más buscadas de la temporada. Un estilo sofisticado inspirado en la primavera caribeña. Igualmente, durante la visita al casco histórico de la ciudad pudimos ver a un Obama relajado que ya para entonces había prescindido de su corbata.

Confiamos que más que una elección de la ropa adecuada, de los gestos precisos, de la cercanía y del sentido del humor presidencial, esta visita se convierta en una oportunidad real para los cubanos que siguen viviendo un año después del deshielo en la economía más precaria donde vestirse hace tiempo que pasó a ser necesidad y no moda y donde pocos entenderán de (desconocidos) diseñadores famosos y caros vestidos con mensajes.

¿Qué opinas?

COMENTAR

Archivado en:


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689