Nunca La Habana había visto tanta cantidad de turistas. La llegada de extranjeros a Cuba alcanzó el record de 4 millones el pasado año y es común ver en las calles de esta ciudad a personas de varias latitudes compartiendo los mismos espacios que los cubanos, alojados en negocios particulares y pidiendo consejo rápido a los habaneros para alquilarse en algún sitio tras su arribo porque apenas hay habitaciones disponibles en los hoteles.
La situación de la capital es solo un ejemplo de lo que sucede en los principales polos turísticos del país. CiberCuba ha constatado que en Trinidad, esa hermosa ciudad colonial al centro de Cuba, hay visitantes que han llegado a dormir hasta en los parques porque no encontraron habitaciones el día de su arribo, a pesar de que los hostales particulares han servido para aliviar la alta demanda de los hoteles que no dan abasto para cumplir con las exigencias de una creciente alza del turismo.
Además, una enorme mayoría de los habitantes de esta conocida ciudad de Sancti Spíritus han convertido sus casas en hostales privados, con lo que han aliviado su economía familiar y han visto como el negocio prospera de la noche a la mañana.
Uno de los casos más ilustrativos de este panorama que, sin duda se incrementará en el 2017, es el famoso balneario de Varadero. En este momento es casi imposible encontrar reserva en algunos de sus hoteles, tanto los más conocidos como aquellos de menos categoría. Los turistas al llegar con la ilusión de reservar una habitación rápidamente para disfrutar de los placeres de esta playa cubana, se han encontrado ante la incertidumbre de no hallarlo con la rapidez que pensaban.
“Casi todos los días vienen clientes a reservar al hotel, pero se asombran porque no hay habitaciones. Entonces tengo que llamar a todos los hoteles de Varadero para ver si tienen la suerte de que exista reserva en alguno, algo que en ocasiones sucede pero en otras no y tienen que irse a los arrendadores privados”, dice en condición de anonimato una carpetera de uno de los hoteles más conocidos del Balneario.
La empleada agrega que “cuando hacen reserva por teléfono, tanto cubanos como extranjeros, tiene que apurarlos para que lleguen con el dinero en la mano lo más rápido posible para ver si aparece una habitación”.
El pasado año Varadero recibió un millón de turistas. Esta cifra ha obligado a la provincia de Matanzas a llevar a cabo una amplia y rápida modernización de sus instalaciones y de los mercados.
Una funcionaria vinculada al turismo en la región señaló que “la provincia comercialmente ha podido diversificar mercados y ha tenido crecimientos significativos en mercados como Alemania, Reino Unido, Francia, Italia, Holanda”.
“Además— dijo— entra con nuevos mercados a la temporada y operaciones aéreas concentradas en Polonia y otros países de Europa”.
La funcionaria no hizo alusión a los visitantes norteamericanos por el hecho de que los viajeros del país del norte no pueden visitar Cuba como turistas debido a las enmiendas del bloqueo. En este caso los norteamericanos, para arribar a la isla, alegan motivos culturales, académicos, entre otros de los permitidos por el Departamento del Tesoro, lo que les sirve de pretexto para tomarse unas vacaciones en codiciados destinos como Varadero.
Para enfrentar la oleada de turistas que espera este destino en el 20117 se terminará el Hotel Internacional con 924 habitaciones de alto estándar y se crearán 1120 habitaciones nuevas de igual categoría para la temporada invernal y mejoras en otras 3000 de los diferentes grupos hoteleros, según conoció CiberCuba.
Los hoteles Iberostar Varadero, Royalton Hicacos, Blau Varadero lideran actualmente las instalaciones de mayor calidad de este balneario cubano.
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