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La presa Zaza vuelve a abrir sus compuertas tras superar capacidad de almacenamiento

La pasada semana  Zaza llegó a acumular 942 millones de metros cúbicos de agua, la tendencia podría persistir mientras dure el período lluvioso porque luego del paso del huracán Irma y las vaguadas que han afectado al país los suelos se encuentran sobresaturados de precipitaciones y los escurrimientos van directo a los embalses.

Presa Zaza © Reidel Gallo/ Escambray
Presa Zaza Foto © Reidel Gallo/ Escambray

Este artículo es de hace 6 años

El mayor embalse de Cuba, la presa Zaza, volvió a abrir sus compuertas el miércoles por segunda vez en una semana, luego de que transcurrieran cuatro años sin realizarse este procedimiento por la intensa sequía que atravesaba la isla.

La presa, que contaba ayer con 915 millones de metros cúbicos de agua, comenzó a registrar grandes acumulados tras el paso del huracán Irma por el litoral norte del archipiélago a principios de septiembre.

Entonces se reportó un incremento de más del 80% de su capacidad e incluso la población de zonas aledañas fue alertada ante la posible crecida del río Cayajana.

“Primero abrimos las seis compuertas a 0.60 metros, lo cual significa un gasto de 348.4 metros cúbicos por segundo. Debido a los pronósticos meteorológicos y a que se mantenía con 914 millones, a las tres de la tarde las subimos hasta 1.20 metros con un gasto de 632.8 metros cúbicos por segundo”, dijo a la prensa local Yusliadys Lorenzo Coca, subdelegada de Recursos Hidráulicos en Sancti Spíritus.

Según señala la directiva, sobre el acuatorio continúa un monitoreo constante en aras de mantenerla en 900 millones de metros cúbicos y se desconoce cuándo se cerrará el aliviadero, pues todo depende de los pronósticos meteorológicos, que prevén lluvias incluso el fin de semana.

La pasada semana Zaza llegó a acumular 942 millones de metros cúbicos de agua, la tendencia podría persistir mientras dure el período lluvioso porque luego del paso del huracán Irma y las vaguadas que han afectado al país los suelos se encuentran sobresaturados de precipitaciones y los escurrimientos van directo a los embalses, explicó.

En tal sentido, buena parte del resto de las represas espirituanas también se encuentran vertiendo de forma natural: Tuinucú, Higuanojo, Siguaney, Aridanes y Banao.

Por su parte, el embalse La Felicidad, que también dispone de compuertas mecánicas, se encuentra al 112% de su capacidad, pero aún admite más líquido y no ha comenzado a aliviar para preservar ese recurso, destacó la publicación.

Con información del diario Escambray

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