En un martes donde la Armada Cubana apenas bateó tres imparables en 32 turnos oficiales, Yoenis Céspedes se comió las espinacas y disparó un jonronazo que cayó a 463 pies en las gradas del izquierdo.
El granmense bateó de 5-1 y para colmo le endosaron otros dos ponchetes, pero logró pegar su quinto bambinazo del curso (y de paso empujar tres carreras), en esta ocasión para empatar ante los Cardenales. Su víctima fue el prometedor Luke Weaver.
La enorme conexión de Céspedes se convirtió en record para jugadores de los Mets desde que entró en uso el sistema de medición Statcast. El batazo salió a 115.1 millas por hora, y constituye el séptimo más largo de lo que va de campaña.
Ahora La Potencia suma 21 remolques, a solo tres del líder Javier Báez.
Poco puede decirse de los otros cubanos que jugaron ayer. Yoan Moncada (Medias Blancas) y Yulieski Gurriel (Astros) estuvieron de 3-1 y 4-1, respectivamente, mientras el resto se iba en blanco.
Son los casos de Yonder Alonso (Indios), José Dariel Abreu (Medias Blancas), Yasiel Puig (Dodgers) y Aledmys Díaz (Toronto), cada uno con cuatro fallos; Jorge Soler (Reales), quien desperdició tres chances y negoció una base; y Kendrys Morales (Toronto), el cual únicamente visitó el home una vez, sin resultado positivo.
Para completar la fecha aciaga, Raisel Iglesias (Rojos) se apuntó su primera misión fallida cuando los Bravos le empataron el partido en el noveno. El pinero, que el día antes había trabajado cuatro outs, ahora logró otros dos mas regaló par de pasaportes, ponchó a uno, soportó un hit y una carrera limpia. Su promedio ascendió a 1.74.
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