APP GRATIS

Memoria del Exilio: "El cuento de la buena pipa"

El Consejo de Ministros - reunido por sepetecienta vez - analiza, estudia y resume los daños causados, en una oficina confortablemente acondicionada, con cómodos butacones.

Raúl Castro y Díaz-Canel durante la Marcha de las Antorchas © Reuters /Fernando Medina
Raúl Castro y Díaz-Canel durante la Marcha de las Antorchas Foto © Reuters /Fernando Medina

Este artículo es de hace 5 años

Érase una vez que era - pues nunca fue, ni ha sido, ni lo será - un paisito, tan bueno, tan bueno, tan bueno, que vivía sumido - casi ahogado- entre miserias, descalabros, injusticias y vicisitudes provenientes de quienes lo mangoneaban y mandaban, sobre todo.

Que hacían de él vertedero de sus más bajas inmundas cochinadas.

Tal fue así que, CUBO terminaron nombrándolo.

Pues, cual balde al tope, recubierto-rodeado de aguas albañales, desbordaba restos - restos mortales - mucha peste a orina de viejo entre consignas, o carnavales-heces fecales y aun así, bailaba, perreaba, rumiaba y hasta, a veces, aplaudía, ovacionando, enfebrecido, sus más que raídas, menesterosas desgracias.

Un dechado de amarguras y cataclismos.

De tanto lavarlo, con la ausencia de moral de su gobierno, lo tornaron gris, empercudido, desahuacatado, soso, vacío.

Lo mismo hicieron con su justicia.

Alteraron su historia.

Le mutaron el alma.

¿Quiénes asistieron a esa fatídica marcha "martiana" celebrada*, luego del potente tornado que asoló algunas barriadas habaneras?

*Sufre hasta el uso del término.

NINGUNO DE LOS AFECTADOS, puede darlo, usted, por hecho.

Para el gobierno es muy fácil armar un molote, crear una manifestación "a favor".

Eso es, para ellos, el pan nuestro que ya os falta cada día.

Han exportado la técnica, incluso, hasta Venezuela.

Con citar a todos los estudiantes universitarios - so riesgo de perder la carrera - a todos los Pre, al EJT y algunas unidades militares - importante es que les ordenan vestir de civil - más toda la seguridad desplegada alrededor de los dirigentes*, hacen unas cuantas cabezas de ganado - bovino u ovejuno - para desfilar tanto "apoyo" a la pobreza - de cuerpo, mente y espíritu - tanto grito en pro de la persistencia de un cataclismo social que nos ha reportado más daños que la suma de todos los fenómenos atmosféricos atravesados por la isla durante toda su historia.

*Nótese en las fotos publicadas en las redes sociales, la amplia zona de malas caras alrededor de sus adustos jefes con caras de circunstancias.

La FEU y la FEEM citan a todos los estudiantes.

Los militantes del Partido y la UJC, también.

Si a eso sumamos un wifi gratuito como les prometieron, muchos jóvenes corrieron a hacerse un espacio más en la libre comunicación*.

*Nada de eso justifica la cómplice asistencia a tan desdichado evento.

Muchos marcharon a chatear y conversar con su familias, o amigos en otros lados. Son los "prospectos de hombre nuevo". Confeccionados, a la misma medida, que aquellos que filmaron con sus celulares entre los cadáveres del avión caído, el año pasado, soltando risitas y "mira esto, acere".

Lo peorcito de la educación socialista.

Sólo en las primera filas de las fotos uno puede encontrar rostros preocupados, serios, haciendo el papel, con esas caras serias con que siempre salen los dirige-gente en las fotos.

Más atrás, estoy seguro, todo era pachanga, conga, muy poco José Julián - triste es admitirlo, por más que nos duela - gente que prefiere ir a divertirse portando una tea encendida y dejando la cagada por todas partes.*

*Hachón encendido no le dan a cualquiera, tiene que ser de confianza.

Porque ¿cómo quedó la calle San Lázaro luego de la concentración encendida?

Hecha mierda también, sucia, cochina.

Como si hubiese pasado un tornado.

Como queda la plaza luego de cada una de sus improductivas concentraciones.

Una reverenda puercada.

Banderitas cubanas tiradas por el piso y por todas partes.

Olor a meao desperdigado en el aire.

Comunales debe hacer un esfuerzo descomunal para limpiar y adecentarlo todo, un poco, después.

Así marcharon, pachanguearon y gozaron* las antorchas por calles iluminadas, en lugar de ir a alumbrar el inmenso apagón de gran parte de la ciudad, que se ceba, a diario, en mentes todavía más oscuras, podridas y retrógradas.

*Para muestra baste el video que acompaña a esta crónica. Filmado in situ, durante el 2011, pero que bien hubiera podido ser el año pasado, o el de la “celebración” del primero de mayo porque todo es lo mismo con lo mismo. Más atrás le sigue un fragmento de la “gozadera” actual.

Y de nuevo aparece Martí como excusa. ¡Pobre Pepe, cuanto mal en tu nombre!

SUPER MARTÍ.

Volando a capa desplegada con el puño firme enfrente, deshaciendo entuertos.

José Martí. Que es como una MARCA REGISTRADA.

Sirve por igual a “apocalípticos” que a “integrados”.

Un diletante exministro de cultura se atreve a vaticinar - cual militante pitonisa - lo que hubiese hecho el Apóstol, de tener acceso a las redes sociales *, mientras el actual Ministro de Turismo, rinde parte al pueblo del buen estado de las instalaciones, que ese mismo pueblo no disfruta. Y exhibe al mundo la importancia de la ortografía, el tacto y el buen tino, para ostentar un cargo público y dirigir a las masas “cárnicas” cubanas.

*Isaac Asimov es un bebe de tetas a su lado azulado.

El Consejo de Ministros - reunido por sepetecienta vez - analiza, estudia y resume los daños causados, en una oficina confortablemente acondicionada, con cómodos butacones, agua a la mano, de seguro alguna que otra merienda, su cafecito o su té, “porque las reuniones cansan y dan mucha hambre”.

Y entonces ellos confían en que todo se recuperará.

Y quedará aún más bonito.

"Y vivirán felices, por los siglos de los siglos, comiendo perdices en el próspero socialismo".

Abogan desde sus desahogados puestos que "la prontitud y la sensibilidad definan la recuperación".

Y uno se pregunta ¿harán aún más pronto lo que llevan sesenta años sin hacer, o destruyendo?

¿Sensibilidad dijeron, o senilidad?

Sin el más mínimo intento de menospreciar daño alguno provocado por el desastre y con el mayor respeto por todas las víctimas - por los que, de verdad, ayudan - he de confesar mi duda ante algunas imágenes publicadas, en las que, no logro diferenciar bien, con los mismos lugares antes del tornado, u otros lugares desolados, por todo el territorio nacional, por donde no pasó fenómeno atmosférico alguno, como no sea el fatal accidente histórico ocurrido en 1959 y que todavía hoy padecemos.

JERARCAS VERSUS INTRUSOS

Cuando de humildad se alardea, el gesto solidario pierde su esencia y fundamento, pasa a ser propaganda, comercial, venta, feria de vanidades disfrazada de altruismo.

Ninguna de las integrantes de la Camerata Romeu son tan conocidas como Yomil y el Dany, Gente de Zona y otros ejemplares más de la amplia fauna y flora repartera.

Por eso la policía - también repartera - no las reconoce, las echan afuera y con el dedito les exigen silencio.

¡Calladitas se ven más bonitas! ¡Muchachitas, dedíquense a su musiquita!

Otros músicos y artistas con mejor suerte se lanzaron a ayudar.

Y a dejar constancia en las redes de su auxilio.

Algunos - me consta - en buena onda y con verdadera humanidad.

Otros anunciando su presencia como promueven sus conciertos. "Hey, mi gente, hoy estamos en Regla, pero, mañana estaremos en el semáforo de Guanabacoa y pasado vamos para Luyanó”. Sólo les ha faltado decir: ¡No se lo pierdan!

Buscando público, fama, qué se yo.

A bailar y a gozar con la desgracia nacional

¿Cuántos conciertos se han propuesto para recaudar fondos?

¿Qué se hará con el dinero que se reúna?

Lo distribuirá, seguramente, una comisión encargada y recibirán su ayuda clasificada, ¿no?

Primero, los revolucionarios.

¿Quién es usted para ofrecer solidaridad por su cuenta?

No, no, en Cuba, para algunos, hasta el amparo debe ser, debidamente, autorizado.

Es el decreto 349 del socorro.

Ellos jerarquizan quienes sí y quienes no.

Ha de ser porque es el Estado el único que puede ofrecer comida en mal estado.

Vendida, además, ¡faltaba más!, por supuesto.

Gratis son sólo las molestias, las indolencias e incomprensiones.

Y lo de la campaña del SÍ convoyada a la desgracia, no tiene nombre.

¡Votemos SÍ y después reconstruyamos!

*¡Después veremos!

Eso es continuidad.

Sí, ¿cómo no?

Del desbarate, el desbarajuste, del infortunio, de la desgracia.

¿Qué opinas?

COMENTAR

Archivado en:

Artículo de opinión: Las declaraciones y opiniones expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor y no representan necesariamente el punto de vista de CiberCuba.

Juan Carlos Cremata Malberti

Director de cine y guionista cubano. Se graduó en 1986 de Teatrología y Dramaturgia, en el Instituto Superior de Arte (ISA) de La Habana, posteriormente cursó estudios en la Escuela Internacional de Cine de San Antonio de los Baños graduándose en 1990.


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada