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Guardabosques de Cuba se suma al 'Trash Challenge' y limpian el río Luyanó

El colectivo señaló que "a pesar de la comunidad haber recibido con agrado la noticia de la actividad, solo respondieron a la convocatoria poco más de una decena de personas".

Limpieza del río Luyanó © Guardabosques
Limpieza del río Luyanó Foto © Guardabosques

Este artículo es de hace 4 años

El pasado sábado, el colectivo ambientalista Guardabosques convocó a un saneamiento en una sección del río Luyanó y asi se sumó al reto #trashtagchallenge que ha tenido lugar en diferentes lugares del mundo, con el objetivo de limpiar el entorno y publicar fotos del antes y el después.

No obstante, el colectivo señaló que "a pesar de la comunidad haber recibido con agrado la noticia de la actividad, solo respondieron a la convocatoria poco más de una decena de personas".

Limpieza del río Luyanó / Foto: Guardabosques

Residuos de plástico, cristal o metales fueron recogidos del río que hoy día tiene un alto grado de contaminación.

"Se trata de un río fuera de la mirada de turistas y delegaciones oficiales, lejos de centros urbanos como El Vedado, La Habana Vieja o Playa, pero se encuentra bien insertado en las dinámicas populares de localidades periféricas como Lawton, Luyanó, la Virgen del Camino, y otras para las que el afluente tiene significados varios", dijo Guardabosques.

Arliz Plasencia, quien trabaja en el colectivo, dijo a la agencia IPS: “Cualquier cosa que hagamos por el medio ambiente, por mínima que sea y aun cuando sabemos que no vamos a lograr sanear, repoblar o reforestar del todo, beneficia de alguna manera al entorno y crea una conciencia en la gente”.

Como parte de este reto viral, el pasado mes varias personas limpiaron la desembocadura del río Almendares de La Habana, el cual es una fuente de contaminación en la ciudad.

El biólogo Isbel Díaz, coordinador del proyecto Guardabosques, dijo a la citada agencia: “Estamos haciendo lo que llevamos haciendo desde hace mucho tiempo. Hemos limpiado los ríos Quibú, Ariguanabo (en la provincia de Artemisa) y Almendares y trabajado también en el Malecón de La Habana. Las actividades, por lo general, tienen esta perspectiva de saneamiento y reforestación”.

“No pedimos permiso para hacer lo que hacemos, porque sentimos que tenemos toda la legitimidad para hacerlo, pero sí nos gusta involucrar a todas las personas que quieran y puedan sumarse y si son instituciones, mejor”, sostuvo.

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