La imagen de un submarinista de la Guardia Civil española rescatando en el mar a un bebé en aguas de Ceuta ha dado la vuelta al mundo en las últimas horas, y se ha convertido en nueva evidencia del drama que supone la emigración ilegal.
"Cogimos al bebé, estaba helado, frío, no gesticulaba mucho", contó sobre la dramática imagen su protagonista, Juan Francisco, agente del Grupo Especial de Actividades Subacuáticas de la Guardia Civil (GEAS) en declaraciones a uno de los numerosos medios de prensa que lo han entrevistado.
Relata que mientras estaba con sus compañeros en el agua vio a una mujer que iba con un flotador de juguete, que era incapaz de poder avanzar ni retroceder y que llevaba algo detrás que al principio pensó que era una pequeña mochila, pero luego descubrió que era la cabeza de un bebé.
"El bebé estaba frío, húmedo. No hacía ningún tipo de gesto, cuando lo cogí no sabía si estaba vivo o no", ha explicado el agente, quien precisó que en ese momento un compañero suyo auxilió a la madre y él se concentró en rescatar al bebé, intentando nadar lo más rápido posible con él hasta la orilla de la costa.
La imagen difundida permite ver a un bebé de unos pocos meses, que lleva puesto un pijama, un gorro y unas manoplas. El guardia civil ha dicho que según lo último que sabe, tanto el niño como su madre consiguieron sobrevivir.
Su trabajo en los dos últimos días ha sido tan intenso que Juan Francisco asegura que no llega a ser consciente de lo mediática que fue su actuación, pues han sido jornadas de estar muchas horas sin salir del agua, intentando salvar la vida de los migrantes que desde el lunes se lanzaron al mar para cruzar a nado la frontera.
La actual crisis migratoria en España ha dejado otras imágenes muy emotivas muy emotivas además de la citada.
"Un migrante besa el casco a un militar y otro le ofrece galletas que le habían dado a él. Un Guardia Civil rescata a un bebé en el mar. Un migrante se abraza a una mujer miembro de Cruz roja y rompe a llorar. Cuando el ser humano da lo mejor de sí mismo, es maravilloso", escribió en Twitter el guardia civil y exdiputado, Juan Antonio Delgado Ramos junto a varias fotos que resumen los momentos más conmovedores del dramático escenario.
Otra emotiva imagen es la de una trabajadora de la Cruz Roja que además de darle agua, abrazó a uno de los exhaustos migrantes que en estos dos días arribaron a las costas de Ceuta.
Otro vídeo difundido muestra el momento en que Mustafa Abdeselam, un monitor de Cruz Roja, carga un bebé de apenas tres semanas de vida que le extendieron a través de un hueco de la valla.
Este miércoles Marruecos cerró los accesos fronterizos, interrumpiendo el éxodo migratorio, y la policía marroquí ha sellado el paso fronterizo del Tarajal. Según datos de la Delegación del Gobierno de España ya suman unas 4,800 las devoluciones de inmigrantes que han entrado irregularmente en Ceuta desde Marruecos.
Entre lunes y martes, más de 8,000 migrantes entraron en Ceuta ilegalmente y España se vio obligada a desplegar al Ejército en la frontera con Marruecos para intentar frenar la avalancha humana.
El Gobierno considera que ha sido un "asalto" a una frontera europea y no una crisis migratoria, aunque cree que todo volverá
El presidente, Pedro Sánchez, comenzó su intervención en la sesión del Congreso de los Diputados este miércoles con este mensaje en Twitter: "Ceuta y Melilla deben saber que cuentan con el apoyo, comprensión y empatía de este Ejecutivo. El Gobierno de España está del lado de la integridad territorial del país, trabajando para garantizar la seguridad y tranquilidad de quienes viven allí".
La actual avalancha de marroquíes sobre la frontera de Ceuta responde a una intención deliberada del gobierno de Rabat, que ordenó no intervenir a sus agentes fronterizos y "castigar" así a España tras una crisis diplomática entre Madrid y Rabat.
El Gobierno marroquí acusa a España de haber dado protección y cuidados hospitalarios en La Rioja al actual líder del Frente Polisario, Brahin Gali, de 73 años, al parecer afectado de COVID-19, y cuya presencia en la península ibérica, con identidad falsa, fue descubierta por los servicios secretos marroquíes.
El Ministerio de Asuntos Exteriores marroquí criticó la decisión española de acoger a Gali y expresó su decepción por este acto contrario al espíritu de asociación y buena vecindad que afecta a “una cuestión fundamental para el pueblo marroquí y sus fuerzas vivas”, en alusión a la soberanía del Sahara.
La comisaria de Interior de la Unión Europea, Ylva Johansson, por su parte, advirtió a Marruecos que su frontera con Ceuta es también “frontera con la UE” e instó a Rabat a cumplir sus compromisos de control del paso de migrantes irregulares.
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