Agentes de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP) incautaron 15 caracoles gigantes africanos en el aeropuerto “George Bush” de Houston, Texas, a principios de julio, que eran transportados en el equipaje de una pasajera de Nigeria.
Los especialistas de agricultura de la agencia, identificaron los ejemplares de esa peligrosa especie invasora que no solo afecta cultivos frutales y plantas; también porta un parásito (gusano) capaz de causar formas raras de meningitis en humanos.
La pasajera viajaba desde Nigeria e inicialmente solo declaró carne seca, pero luego se detectaron los caracoles vivos. Durante un examen del equipaje, los especialistas encontraron tres bolsas de plástico con cierre hermético que contenían los caracoles vivos con hojas frescas y alrededor de 0,25 libras de carne de res.
Los especímenes incautados fueron entregados al Departamento de Agricultura de EE. UU. (USDA). “Nuestros especialistas en agricultura permanecen vigilantes para proteger a los EE. UU. De enfermedades animales y vegetales extranjeras que podrían amenazar la producción agrícola y la industria ganadera de EE. UU. O transmitirse a los humanos”, dijo el director del puerto de CBP de Houston, Shawn Polley, de acuerdo con un informe de la agencia.
El caracol gigante africano es considerado una amenaza potencialmente grave como especie invasora que podría afectar negativamente a la agricultura, los ecosistemas naturales, la salud humana o el comercio.
Según el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades, se han informado más de 2,800 casos en la literatura médica y científica de aproximadamente 30 países. Los 15 caracoles interceptados por el puerto fueron entregados al USDA para su disposición final.
Los especialistas en agricultura de CBP, descubrieron en un día típico del año fiscal 2020, cerca de 250 plagas en los puertos de entrada de EE. UU. Y 3,091 materiales para cuarentena, incluyendo plantas, carnes, subproductos animales y suelo.
La especie, también conocida por su rápida reproducción, ha sido introducida en países como Cuba, llegando a extenderse a prácticamente todo el territorio nacional. En octubre de 2020, Ariel Castillo Rodríguez, subdirector de la Dirección de Sanidad Vegetal del Ministerio de la Agricultura (MINAG), alertaba que entonces la distribución del caracol comprometía a 59 municipios del archipiélago, con más de mil focos.
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