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En medio de las acciones del nuevo gobierno de Estados Unidos para detener la inmigración ilegal, la Patrulla Fronteriza advirtió este jueves que quienes intenten pisar tierra por vía marítima "serán devueltos" a su país de origen o a su punto de partida.
A través de un comunicado posteado en X el jefe de la Patrulla Fronteriza del Sector de Miami, Jeffrey Dinise, subrayó que aquellos que ingresen ilegalmente al país por mar serán devueltos, ya sea a su lugar de origen o al último país desde donde partieron, como parte de una política más estricta de control de la frontera.
"Los viajes marítimos ilegales en embarcaciones sobrecargadas o de fabricación casera son extremadamente peligrosos y pueden ser fatales. No sólo estamos comprometidos con la seguridad de las personas, sino con la protección de la soberanía nacional", dijo el funcionario al tiempo que recordó que la Patrulla Fronteriza está intensificando las operaciones para frenar el ingreso ilegal por mar.
Esta advertencia forma parte de una serie de medidas de la nueva Administración que buscan endurecer el control migratorio en EE.UU. e implementar la política de deportación acelerada que fue aprobada durante el gobierno de Donald Trump.
El gobierno de EE.UU. también ha adoptado medidas que otorgan mayores poderes a los funcionarios de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) para deportar rápidamente a inmigrantes indocumentados.
Esta política de "expulsión expedita" permite que las autoridades deporten a personas que no puedan demostrar que han estado en el país por más de dos años, sin necesidad de pasar por el sistema judicial de inmigración.
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En los últimos días el gobierno movilizó flotas de aviones militares para las deportaciones masivas, a 1,500 soldados para reforzar las fronteras terrestres, mientras que la Guardia Costera (USCG) ordenó un despliegue inmediato de activos navales en la frontera marítima con Cuba.
Las áreas específicas de atención de la USCG incluyen la frontera sureste de EE. UU., que se extiende hacia Florida, con el fin de disuadir y prevenir una migración masiva desde Haití y Cuba.
La frontera marítima alrededor de Alaska, Hawai’i y los territorios de EE. UU., incluidos Guam, las Islas Marianas del Norte, Samoa Americana, Puerto Rico y las Islas Vírgenes de EE.UU.
También la frontera marítima entre las Bahamas y el sur de Florida, la frontera marítima suroeste entre EE. UU. y México en el Pacífico y la frontera marítima entre Texas y México en el Golfo de México.
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