En recta final montaje de parque de energía eólica en el oriente cubano

Apenas la tormenta tropical Noel se alejó de la región oriental de Cuba y las lluvias dieron respiro, los constructores e inversionistas del parque eólico de Gibara reiniciaron las tareas de montaje y, breves días después, quedó instalado completo el primero de los seis molinos.Con capacidad de generación para 5,1 MW, a casi 40 kilómetros al norte de la ciudad de Holguín, al este de La Habana, la institución se adentra en la terminación de la segunda de sus unidades y crea condiciones para iniciar el montaje del tercer molino.Cada molino está soportado por una torre o mástil de 55 metros de altura y su peso, sumado el equipamiento, asciende a cerca de 100 toneladas.Tercero de los parques eólicos de Cuba —los otros son el demostrativo de la isla de Turiguanó y el de la Isla de la Juventud, de tipo abatible—, verá nacer el próximo año en su cercanía, una cuarta instalación con generadores de más potencia, denominada Gibara II.Cuando los seis aerogeneradores de este parque sean interconectados a la red eléctrica nacional, en el país se podrán producir ya 11,7 megaWatts sin gastar un gramo de petróleo.Los molinos de Gibara generarán 850 kW por hora como máxima potencia. Son de tipo fijo, están concebidos para que, con vientos muy fuertes, detengan automáticamente su accionar y, también, para que logren el máximo aprovechamiento de la fuerza del viento.El campo se conectará al Sistema Eléctrico Nacional por una línea ya construida y la subestación de 33kV de Gibara.