Al menos 60 personas y más de 170 heridos es el resultado parcial de los graves incendios que se declararon al noreste de Atenas desde la tarde de ayer lunes. Entre los fallecidos hay varios niños y adolescentes, y de los heridos al menos 11 se encuentran en estado crítico y en cuidados intensivos.
Los incendios han arrasado viviendas y han obligado a evacuar poblaciones enteras. Como ya sucedió en el grave incendio que azotó Portugal hace unos meses, hay familias que se vieron atrapadas por las llamas mientras intentaban huir.
Pese al fuerte despliegue de bomberos en la zona, el fuego sigue descontrolado y no se descarta que en las próximas horas la cifra de fallecidos, heridos y también desaparecidos continúe subiendo.
Medios de prensa destacan que los fallecidos fueron encontrados en el área situada entre el puerto de Rafina ―a unos 30 kilómetros de Atenas― y Nea Makri (unos 10 kilómetros más al norte).
Según confirmaron los guardacostas, desde las playas de la zona varias personas se lanzaron al mar presas del pánico y aunque varias han sido rescatadas otras siguen desaparecidas.
Entre los rescatados se encuentran dos daneses que nadaban en el mar mientras que un ferry habría rescatado primero a una familia con tres niños y luego a otras siete personas.
Las autoridades griegas han declarado el estado de emergencia y han pedido ayuda de la Comunidad Europea. El primer ministro griego, Alexis Tsipras, ha adelantado su regreso a Grecia desde Bosnia-Herzegovina, donde se encontraba para gestionar la crisis.
Se desconocen las causas del incendio aunque las autoridades sospechan que ha sido provocado.
Imagen: REUTERS/Costas Baltas
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