Varios choferes cubanos brindaron sus servicios a un grupo de niños hospitalizados en la sala de oncohematología del hospital pediátrico Juan Manuel Márquez, de Marianao.
Los pequeños dieron un recorrido de ciudad por La Habana acompañados de sus familiares y parte del personal médico del hospital.
Cada pequeño pudo elegir el auto que más le gustaba, según el tamaño o el color.
En sus antiguos carros americanos convertibles, estos choferes tuvieron la iniciativa de regalarles un recorrido a los pequeños, cuyos tratamientos no les permite a la mayoría realizar actividades.
“Esto es lo que podemos brindarle nosotros, porque es nuestro trabajo, y queremos seguir haciéndolo”, dijo uno de los choferes a la televisión estatal.
“Es un regalo, una oportunidad que tienen de hacer algo diferente, ya que por su sistema de aislamiento no pueden hacer este tipo de cosas”, explica otra de los entrevistadas.
Según el reporte, la iniciativa estuvo a cargo de los choferes de la agencia de taxis número 9, de la capital, que pusieron 23 carros a disposición de los pequeños.
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