En la ciudad de Cienfuegos, se encuentra uno de los más importantes hoteles cubanos de la primera mitad del siglo XX. A sus 95 años de fundado el Hotel San Carlos ha vuelto a ocupar titules en la prensa de la Isla. Es una de las propiedades en litigio bajo el amparo de la Ley Helms-Burton.
Tres hoteles en el corazón de la ciudad
La ciudad de Cienfuegos era una urbe próspera, cuyo desarrollo se sustentaba en un fuerte intercambio económico a través de su puerto. Por eso, desde la segunda mitad del siglo XIX se convirtió en una región con alta demanda de servicios de hostelería.
El flujo de negocios y la actividad financiera, propició que en su centro urbano se ubicaran, en la década de 1920, los tres hoteles más importantes de la región: Hotel La Unión, Hotel Ciervo de Oro y Hotel San Carlos. De ellos, los dos últimos, fueron propiedad de Antonio Mata.
Un emigrante asturiano que hizo fortuna en Cienfuegos
Antonio Cuco Mata Álvarez era un empresario asturiano que invirtió en la hostelería cienfueguera. Poco a poco vio incrementarse sus ingresos y aseguró el capital necesario para construir un hotel de referencia nacional.
En 1921, con una inversión inicial de 60 000 pesos y bajo las indicaciones del arquitecto italiano Alfredo Colli, comenzó a construirse el edificio más alto de Cienfuegos durante décadas: el Hotel San Carlos.
Ninguna crisis ha podido derruir al San Carlos
En 1922 la crisis económica provocó la detención de la obra que fue terminada en 1924, por el arquitecto José Joaquín Carbonell. En su inauguración contaba con cuatro niveles. En la planta baja se encontraba la recepción, cafetería, restaurante y almacenes. Tenía 41 habitaciones.
Sin embargo, a su propietario no le pareció suficiente. Solicitó a la alcaldía una ampliación e incorporó en el nuevo proyecto dos pisos más y servicios sanitarios en cada planta. En la cumbre creó el Roof Garden, un salón para fiestas con vista panorámica de Cienfuegos.
El Hotel San Carlos tuvo un coste aproximado de 70 000 pesos. Pero durante 37 años sus 53 habitaciones para huéspedes mantuvieron estándares de ocupación elevados. Alojó además a la familia propietaria y personal de servicio.
La Revolución llegó al San Carlos
Con el triunfo revolucionario, el hotel fue intervenido y la familia Mata residió en él hasta 1981, año en que uno de los nietos del propietario se marchó a Estados Unidos y la otra nieta fue reubicada en una casa en la Avenida del Prado cienfueguero.
Paulatinamente la calidad de los servicios y la belleza del San Carlos cedió ante la desidia de la propietaria pública en Cuba. En 1984 se iniciaron trabajos de reconstrucción que nunca concluyeron. El Hotel quedó a merced de actos vandálicos y su deterioro fue tal que en el año 2000 llegó a valorarse la posibilidad de demolerlo.
En el 2005, atendiendo al valor de la edificación para el paisaje urbano de la Ciudad de Cienfuegos, que en ese año se incorporó a la Lista del Patrimonio de la Humanidad, se inició la restauración total del edificio. Pero el Ministerio de Turismo de Cuba volvió a paralizar las obras por razones económicas.
Restauración del Hotel San Carlos
En el 2018 finalmente el Hotel San Carlos fue restaurado. En la actualidad tiene categoría de 4 estrellas y es administrado por la compañía española Meliá y la cubana Gran Caribe. Ofrece atención personalizada y tiene un colectivo de trabajo profesional.
Sin embargo, a tan solo un año de su reapertura ya la mugre ha comenzado a dejar huella en sus blancas paredes interiores y en las puertas de los ascensores. En la mesa del lobby había marcas de vasos y los espejos lucen empañados.
Si bien es cierto que nada queda allí de aquel "tugurio de mala muerte" por donde los cienfuegueros apuraban el paso en los años 1990, y que un toque de glamour se observa desde la calle a través de las ventanas, tampoco ahora la gente de Cienfuegos suele traspasar el umbral del "San Carlos".
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