La Oficina Nacional de Administración Tributaria (Onat) de La Habana, divulgó este viernes un comunicado para recordar a todos los contribuyentes que el próximo 30 de abril vence el plazo de presentación y pago voluntarios de la declaración jurada de los ingresos personales de personas naturales.
En el periódico Tribuna de La Habana del pasado 6 de abril, se puede leer: "Una vez que los contribuyentes no presenten esta declaración jurada, la Onat procederá a aplicar el régimen sancionador mediante el Decreto 308/2012 por el incumplimiento de este deber formal imponiendo multas de 100 y hasta 600 pesos cubanos”.
El caso es que, a menos de un mes del vencimiento de este plazo, unos 40.000 trabajadores por cuenta propia de la provincia de La Habana, no han pagado los impuestos correspondientes al año 2017.
Este número representa el 46% del total de 72.247 trabajadores por cuenta propia de la capital, lo cual se traduce en que casi la mitad no ha pagado los impuestos sobre sus ingresos personales. Dentro de estos se destacan los arrendadores, boteros, dueños de paladares y cafeterías, comunicadores y diseñadores.
Teniendo en cuenta que Cuba prevé para el 2018 que los impuestos, las tasas y contribuciones aporten el 75% de los ingresos al presupuesto estatal, la Onat debería jugar un mejor papel en "educar" al nuevo sector económico, en el cual la falta de cultura tributaria, de gestión de negocios y la desinformación son protagonistas, sin contar que los altos precios de las licencias, los constantes decomisos y multas y la obligación de contratación de personal, no dejan mucho excedente sobre la mesa.
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