Una familia de Manzanillo lo perdió todo después de que se incendiara su casa el pasado 1 de julio, cuando se disponían a salir a dar una vuelta tras pasar varias horas sin luz, en medio de la tormenta que azotó la localidad.
Fue en ese momento cuando sintieron un olor extraño, "a goma quemada". Fue visto y no visto. En cuestión de segundos salieron las primeras llamaradas de una vivienda humilde ubicada en la calle Purísima esquina con la Avenida Paquito Rosales, de Manzanillo.
Los vecinos echaron una mano para evitar que el fuego se propagara a las viviendas colindantes, mientras llegaban los Bomberos que, según informa en Facebook Giordan Rodríguez Milanés, tardaron muy poco en personarse en el lugar de los hechos y en sofocar el incendio, pero para entonces la familia había perdido lo poco que tenía.
"Apenas pudieron salvar algunas pertenencias", apunta Giordan Rodríguez que, aclara que los propietarios de la vivienda y los vecinos montaron guardia hasta el amanecer para evitar que se les colaran en la vivienda.
Los Bomberos achacan el incendio al mal estado de la instalación eléctrica de la casa.
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