APP GRATIS

Un padre cubano buscaba su segundo hijo y llegaron trillizos: "Me asusté"

Los bebés, prematuros, están siendo alimentados con leche en polvo y vitaminas.

Padre de trillizos en Cuba. © El Artemiseño.
Padre de trillizos en Cuba. Foto © El Artemiseño.

Este artículo es de hace 5 años

Suleidys y Rubisel son cubanos y se hicieron novios cuando estaban en el preuniversitario. Llevan 20 años casados y tienen una niña de 11 años, pero decidieron ampliar la familia. La sorpresa fue mayúscula cuando les dijeron que venían trillizos.

"¿A qué padre en busca de un segundo hijo, le dicen que le vienen tres más, y no se asusta, no se pone pálido? Me tuve que sentar, porque me asusté, la verdad”, comenta Rubisel al periódico local El Artemiseño.

Los trillizos, en Neonatología. Foto: El Artemiseño.

Hasta ahora Suleidys y Rubisel no habían tenido tiempo de buscar un segundo hijo porque tras graduarse, él de Ingeniería en Electromedicina y ella de Matemáticas y Computación, él cumplió varias misiones médicas. Estuvo en Honduras (2008-2010); en Bolivia (2012-2014) y luego repitió en este país entre 2016 y 2018.

En agosto de 2016 estuvieron a punto de tener una segunda hija, pero los médicos les advirtieron de que tenía malformaciones y les aconsejaron abortar a los 7 meses de embarazo. Suleidys quedó devastada.

En febrero de 2018 volvió a quedarse encinta. Faltaba poco para que Rubisel regresara a Bolivia. Fue entonces cuando les dijeron que traían trillizos. Cuando el padre regresó en junio de la misión se encontró a su mujer ingresada en el hospital Ciro Redondo de Artemisa. Él pidió el fin de la misión.

A mitad de septiembre, a Suleidys le subió mucho la presión y hubo que provocar el parto. Los tres bebés nacieron prematuros, con poco más de 26 semanas, y la madre se llevó la peor parte. Su estado era delicado y fue trasladada a cuidados intensivos con problemas renales. Los pequeños Kevin Michel (1.900 gramos), Dayron Leonel (2.050 gramos) y Brayan Rubisel (1.600) pasaron a Neonatología.

El más chiquitico perdió peso, se quedó en 1.300 gramos y tuvo que ser trasladado a otro hospital. Rubisel visitaba a su esposa en cuidados intensivos, a los dos bebés que seguían en el cunero y luego se iba a ver a su otro hijito en el Iván Portuondo de San Antonio de los Baños.

La madre, Suleidys, con sus tres hijos. Foto: El Artemiseño.

Seis meses después la mamá ha sido dada de alta y ya está en casa con sus niños, que han sido alimentados con leche en polvo y vitaminas. Brayan, el más pequeño, sigue recibiendo inyecciones para conseguir que le suba la hemoglobina.

¿Qué opinas?

COMENTAR

Archivado en:


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

 +1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada