Las autoridades de la Empresa Eléctrica de Cienfuegos confirmaron el viernes que los apagones en la provincia han sido prácticamente generales, como consecuencia del mantenimiento simultáneo de los dos bloques de la termoeléctrica local “Carlos Manuel de Céspedes” y de un severo déficit de combustible que afecta a la generación distribuida.
Durante una comparecencia en el telecentro Perlavisión, directivos del sector explicaron que la falta de combustible ha provocado la salida de servicio de varios emplazamientos de generación distribuida, lo que se ha traducido en altos niveles de déficit a nivel nacional y, consecuentemente, en afectaciones masivas en la provincia.
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"Nosotros somos el resultado de aproximadamente un 4% o 5% del déficit nacional", señalaron, añadiendo que esta situación ha obligado a mantener durante varios días el llamado "máximo apagable" en Cienfuegos, lo que equivale a dejar sin electricidad a casi todo el territorio, salvo los circuitos que abastecen hospitales, la termoeléctrica y otras instalaciones vitales.
Según explicaron, la provincia ha enfrentado déficits de hasta 80 megawatts en jornadas recientes, cifra que consideran "extrema", dado que el máximo apagable en condiciones normales es de 85 megawatts, incluyendo los servicios esenciales. Al alcanzar un déficit de 80 megawatts, prácticamente toda Cienfuegos queda sin electricidad, salvo contadas excepciones.
"Cuando llegamos a 80 megawatts de déficit, prácticamente se quedan con servicio solo los cuatro circuitos de los hospitales y el circuito que suministra electricidad a la termoeléctrica, para garantizar los mantenimientos", precisaron.
La grave situación también ha impactado los circuitos considerados tradicionalmente "no apagables", como los que suministran a centrales azucareros y centros de acopio, que han tenido que ser desconectados en algunos momentos críticos.
Las autoridades reconocieron que esta situación impide aplicar rotaciones regulares del servicio eléctrico entre los municipios, una de las principales quejas de la población, ya que no se puede alternar la disponibilidad del servicio, afectando de manera constante a amplias zonas sin oportunidad de recuperación parcial durante el día.
Finalmente, los directivos llamaron a la población a comunicarse a través del número telefónico 43 51 83 35 para canalizar sus inquietudes y garantizar que sus reclamaciones sean atendidas.
Mientras tanto, Cienfuegos enfrenta uno de los escenarios energéticos más complicados de los últimos meses, reflejo de la profunda crisis energética que atraviesa el país.
Preguntas Frecuentes sobre la Crisis Energética en Cienfuegos
¿Por qué se están produciendo apagones casi generales en Cienfuegos?
Los apagones en Cienfuegos se deben al mantenimiento simultáneo de los dos bloques de la termoeléctrica “Carlos Manuel de Céspedes” y a un déficit severo de combustible que afecta la generación distribuida. Esto ha provocado un déficit de hasta 80 megawatts, dejando sin electricidad a casi toda la provincia, salvo los circuitos que abastecen instalaciones vitales como hospitales.
¿Por qué no es posible rotar los circuitos eléctricos en Cienfuegos?
No es posible rotar los circuitos eléctricos en Cienfuegos debido a la incapacidad energética del territorio para implementar una programación que permita alternar los apagones. La falta de capacidad de generación suficiente impide aplicar rotaciones regulares, lo que deriva en apagones prolongados y continuos.
¿Cuál es la situación actual de la termoeléctrica "Carlos Manuel de Céspedes"?
La termoeléctrica "Carlos Manuel de Céspedes" está en mantenimiento intensivo, lo que ha dejado a Cienfuegos sin generación local. Se espera que la sincronización de la unidad tres ocurra en la primera quincena de abril, mientras que la unidad cuatro está prevista para junio. Este mantenimiento es crucial para restaurar su capacidad operativa y aliviar la crisis energética en la región.
¿Cómo está afectando la crisis energética a la población de Cienfuegos?
La población de Cienfuegos enfrenta apagones prolongados sin la posibilidad de alternar el servicio eléctrico, lo que afecta gravemente la vida cotidiana. La falta de electricidad impacta la conservación de alimentos, la cocción de comidas y el funcionamiento de electrodomésticos esenciales. Además, la desigualdad en la aplicación de los cortes eléctricos ha generado malestar y reclamos de equidad en la distribución de la carga.
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