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La Fiscalía Estatal del Condado de Miami-Dade divulgó esta semana perturbadoras imágenes de un caso que ha generado indignación pública: el presunto maltrato físico y psicológico de un niño de seis años a manos de su padrastro, identificado como Zachary Pérez, de 42 años.
Los hechos ocurrieron en mayo de este año en una vivienda del suroeste de Miami-Dade, donde residía el acusado junto a su esposa, su hija y sus dos hijastros. En el video captado por una cámara de seguridad dentro del hogar, Pérez aparece caminando con el menor al que le ha colocado un collar de perro en el cuello y sostiene una correa rosa. En otro momento, lo arrastra por el suelo, lo patea varias veces y lo persigue con lo que parece ser un palo.
Según registros judiciales, otro video muestra al niño corriendo con una mochila llena de piedras, mientras que otros clips evidencian golpes dentro de la sala y una habitación. El menor terminó con los ojos hinchados, múltiples rasguños, un sarpullido en el cuello y marcas compatibles con ramas, según el reporte forense citado en el caso.
El arresto de Pérez ocurrió el 10 de mayo y fue ingresado en el centro correccional Turner Guilford Knight (TGKCC). Durante su primera comparecencia judicial, la jueza a cargo del caso le negó el derecho a fianza, calificando los hechos como "abuso infantil agravado con tortura". “La verdad es horrible que a esta altura de la humanidad sigamos haciendo estas cosas tan penosas, se me ha hecho un nudo en la garganta”, declaró en esa audiencia.
La madre del menor fue quien alertó a las autoridades y denunció las agresiones, tras lo cual Pérez fue acusado formalmente por abuso infantil agravado con grandes daños corporales. Desde entonces, varias personas han contactado a la Fiscalía alegando haber sido víctimas de maltrato por parte del mismo acusado en el pasado, incluyendo a su hija de 14 años. De acuerdo con los fiscales, se han emitido al menos cinco medidas cautelares previas contra él por violencia doméstica.
La defensa legal de Pérez ha argumentado que el acusado padece trastorno de estrés postraumático (TEPT), problemas de audición y que ha sido sometido a cirugías tras servir como infante de marina en Irak. Su madre testificó que sufre de una lesión cerebral traumática. Aun así, la Fiscalía mantiene que representa un riesgo para su entorno.
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Pese a la gravedad del caso, el pasado 10 de junio Pérez fue liberado bajo arresto domiciliario con una orden de alejamiento de al menos 500 pies respecto a las víctimas y sin contacto directo o indirecto. Se espera que regrese a corte el próximo 28 de agosto para continuar el proceso judicial.
Amanda Altman, directora ejecutiva de Kristi House, un centro de defensa infantil en Miami, declaró: "El niño probablemente tiene traumas y lesiones emocionales, psicológicos e incluso físicos, que habría sufrido a causa de este horrible abuso". También señaló que el pasado no tratado de Pérez podría haber influido en su comportamiento: "¿Qué trauma habría sufrido para el cual nunca recibió la intervención adecuada?".
Preguntas frecuentes sobre el caso de abuso infantil en Miami
¿Qué ocurrió en el caso de Zachary Pérez en Miami?
Zachary Pérez fue acusado de abuso infantil agravado tras ser captado en video maltratando físicamente a su hijastro de seis años, incluyendo el uso de un collar de perro y una correa para maltratarlo.
¿Cuál fue la reacción de las autoridades ante el caso de Zachary Pérez?
La jueza a cargo del caso negó el derecho a fianza a Pérez considerando los hechos como "abuso infantil agravado con tortura". A pesar de esto, fue liberado bajo arresto domiciliario con una orden de alejamiento de al menos 500 pies respecto a las víctimas.
¿Qué argumenta la defensa de Zachary Pérez?
La defensa legal de Pérez alega que su cliente sufre de trastorno de estrés postraumático y problemas de audición, además de haber sido sometido a cirugías después de servir como infante de marina en Irak. También mencionaron que padece una lesión cerebral traumática.
¿Cómo ha impactado este caso en la comunidad?
El caso ha generado una gran indignación pública y ha puesto de relieve la gravedad del maltrato infantil en la sociedad. También ha surgido un debate sobre la necesidad de identificar y tratar traumas no resueltos que pueden llevar a este tipo de comportamientos.
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