El cubano Erick Hernández impuso el pasado sábado una nueva marca mundial de dominio del balón en la inédita modalidad de sentado y solo con los pies, y se añadió tres libras de peso en cada tobillo.
Durante una hora y diez minutos, el habanero estuvo golpeando el balón sin que cayera al suelo, aunque el peso que le sirvió de lastre para complicar la prueba le provocó una contractura en la pierna izquierda, que varió su ritmo e impidió que pudiera golpear el balón durante una hora y media, que era su deseo.
No obstante, ningún dominador del mundo hasta ahora había intentado similar prueba. El encuentro tuvo lugar en el Hotel Riviera, desde las 9:00 de la mañana, y se llevó a cabo como festejo por el advenimiento de la próxima Copa del Mundo de Fútbol, en Rusia.
En declaraciones previas a un medio de prensa de la Isla, el deportista había destacado que se venía preparando desde los primeros días de enero, y que el trabajo fundamental había consistido en el fortalecimiento de los abdominales de tronco y piernas, por el fuerte trabajo que harían esos músculos durante la prueba.
Hernández ―de 49 años de edad― también insistió en el entrenamiento con pesas para robustecer los cuádriceps, gemelos y bíceps femorales, así como el trabajo de los músculos de la espalda alta, hombros y tríceps.
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