James Breslin tardará tiempo en olvidar el pasado 31 de mayo, día en que ayudó a traer al mundo a un bebé que no quiso esperar a que sus padres llegaran al hospital.
Según recogió el canal WSVN-TV, este ayudante del sheriff del condado de Palm Beach se encontró con una situación de emergencia cuando vio detenido con las luces de emergencia un auto.
"Miré, revisé mis retrovisores y vi un auto, cuyo conductor tenía la ventanilla bajada. Tenía una mirada en su rostro que de alguna manera pedía ayuda", aseguró el agente al citado medio.
Breslin comunicó por radio lo que estaba sucediendo, pero la realidad es que no había tiempo de esperar a los servicios de emergencia. "El esposo me dijo que la cabeza ya estaba saliendo", afirmó. Así que se acercó a la mujer mientras el futuro papá trataba de comunicarse con el 911.
"Extendí mi mano derecha y el bebé salió como disparado. Atrapé la cabeza y los hombros del bebé", agregó el policía.
El pequeño y la mamá fueron llevados al hospital, donde los médicos confirmaron el buen estado de salud de ambos.
"Fue muy reconfortante tenerlo porque somos solo Jack y yo. Hemos pasado por muchas cosas juntos, pero esta fue la primera vez para nosotros", aseguró Ghita, la feliz mamá que elogió la actuación del agente.
Breslin todavía recordó emocionado el bello momento que vivió. "Me siento tan afortunado de haber sido parte de esto. Honestamente, tengo ganas de llorar un poquito", relató al recordar el día que dio la bienvenida al pequeño Charlie.
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