El hambre de dólares norteamericanos que padece el tardocastrismo provocó la ocurrencia inconstitucional e ilegal de someter a nacionales que regresan del extranjero a un Paquete de aislamiento, de una semana, sin que haya trascendido su costo ; siempre que lleguen a Cuba por aeropuertos turísticos, como los de Varadero, Cayo Las Brujas o Jardines del Rey, a partir del 5 de junio.
Francisco Durán García, director nacional de Epidemiología del Ministerio de Salud Pública (Minsap), anunció la mala nueva para cubanos viajeros, explicando que el internamiento será en la localidad de llegada, al margen de donde resida el viajero, que será sometido a una PCR, al sexto día de aislamiento y -si resulta negativa- podrá movilizarse a su hogar en taxi o un ómnibus alquilado entre varios residentes.
La decisión recaudatoria gubernamental estaría amparada en el riesgo epidemiológico, incluidas las nuevas cepas que circulan en la isla, y en la "necesidad de reducir los costos asociados al enfrentamiento de la pandemia”, comentó Durán, en su habitual conferencia de prensa, donde solo da malas noticias para los cubanos.
¿Qué pinta un epidemiólogo prestigioso haciendo de portavoz de la recaudación dolarizada en medio del peor brote de coronavirus en Cuba? Durán, antes que burócrata del MINSAP y militante del Partido Comunista, es un ser humano y médico, que juró salvar vidas, no empobrecerlas, ni agredirlas.
El tardocastrismo pisotea la Constitución de 2019 y la Ley de Salud Pública (41/1983), que ya está en fase de revisión, según Dagmara Cejas Bernet, directora del Departamento Jurídico del MINSAP, en una charla con los representantes de la OPS/OMS en La Habana, permanentes aliados de la dictadura cubana.
Como muestra, un botón: "Cuba es un modelo para otros países, pues demuestra que la salud es un derecho humano para todos, no un privilegio para unos pocos. En Cuba ya no es una aspiración sino una realidad que todos tengan acceso a servicios de salud de calidad", dijo Tedros Adhanom Ghebreyesus, director General de la Organización Mundial de la Salud, en la inauguración oficial de la Convención Internacional Cuba Salud 2018.
La venta del Paquete de aislamiento -en dólares norteamericanos, para mayor escarnio- vulnera el Artículo 72 de la Constitución que reza: La salud pública es un derecho de todas las personas y es responsabilidad del Estado garantizar el acceso, la gratuidad y la calidad de los servicios de atención, protección y recuperación.
Y también viola el Artículo 4 de la Ley de Salud Pública de Cuba, que estable: La organización de la salud pública y la prestación de los servicios que a ella corresponde en nuestra sociedad socialista se basan en:
a) El reconocimiento y garantía del derecho de toda la población a que se atienda y proteja adecuadamente su salud en cualquier lugar del territorio nacional;
b) El carácter estatal de las instituciones, la gratuidad de los servicios de la salud y de la asistencia médica, de acuerdo con las regulaciones que al efecto se establecen.
Y complementa estas acciones, en su Artículo 13: La atención médica preventivo-curativa a la población se garantiza y se ofrece a través de las instituciones del Sistema Nacional de Salud organizada por niveles de atención, de forma ambulatorio u hospitalaria y de acuerdo con el lugar de residencia, trabajo o estudio y necesidades de la población, según lo establece el Ministerio de Salud Pública.
Hasta el momento, la Unión de Juristas de Cuba, tan diligente en la defensa de un vocero del tardocastrismo que agredió a una mujer, el ministro de Justicia y la aguerrida fauna de gusañeros contra el embargo, no han dicho una palabra sobre el atropello jurídico de cubanos residentes en la isla, que viajan a expensas de notables sacrificios propios y de sus familiares en el extranjero.
El tardocastrismo es un ejemplo permanente de comunismo, discrimina y explota a la mayoría, en beneficio de una casta verde oliva, que sigue empeñada en un comportamiento zarista, ignorando el peligro que entraña pisotear y agredir constantemente a muchos cubanos.
Cuentan que Robin Hood, Curro Jiménez, Malospelos y Manuel García Ponce robaban a los ricos para socorrer a los pobres; el tardocastrismo roba a los pobres para hacer más ricos a los pocos acaudalados de la Cuba que mancilla.
Ya avisó Guillermo Portabales: ¡Oh, Cuba hermosa!, porqué sufres hoy, tanto quebranto; ¡oh, patria mía!, quien diría que tu cielo azul, nublara el llanto; ¡Oooohhhh, en el susurro del palmar!, se oye el eco resonar, de una voz de dolor, que al amor llama...
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