Se investiga plagio a McDonalds en Cuba

En Cuba el respeto hacia la propiedad intelectual o artística, expresada lo mismo en canciones, como en marcas, negocios, software, programas de televisión y otras expresiones comerciales, es un tema altamente cuestionable.

Como la isla lleva décadas al margen de la dinámica capitalista del primer mundo, donde una simple idea puede valer millones, se ha hecho frecuente en el país el plagio desmesurado a cualquier iniciativa foránea reconocida, para asegurar la fama que esta se ganó con anterioridad.

De acuerdo con un reciente reportaje de la agencia Reuters, cuando hace dos años Julio Manzini bautizó como McDonald's a su cafetería, por la cadena estadounidense, nunca imaginó que le podría traer problemas.

"Ni sé la calidad de la McDonald's. El nombre es como Shakira, impactante", dijo en su cafetería "La McDonald's Camagüeyana", en la ciudad de Camagüey, a 500 kilómetros al este de La Habana.

Este mes Julio decidió retirar el nombre de "McDonald's" y los famosos arcos dorados de su cartel hecho a mano, luego que la famosa empresa estadounidense envió un abogado al restaurante.

La falsa McDonald's puede suponer una posible batalla entre EE.UU y Cuba por las marcas y los derechos de propiedad intelectual, en la medida en que la economía de Cuba se abre al sector privado y a nuevos vínculos con Washington, precisa Reuters.

"Estoy muy asustado. Yo no vendo mil pesos cubanos (40 dólares) aquí al día," dijo Manzini.

Cuba protege las marcas que están registradas ante las autoridades del país, pero tolera la venta de música, software y películas sin licencia. La televisión estatal transmite diariamente películas, shows y series estadounidenses descaradamente pirateadas.

Manzini dijo que nunca se le ocurrió ver con la Oficina Cubana de Propiedad Industrial (OCPI) si estaba disponible el nombre McDonald's. La empresa estadounidense ha registrado marcas en Cuba desde al menos 1985.

Desde 1966, alrededor de 1.500 empresas estadounidenses han registrado casi 6.000 marcas en Cuba, incluyendo Coca-Cola, Pepsi, Levi's, Nike, Starbucks Coffee, Pfizer, Intel, Burger King, KFC y Goodyear.

Ahora que Cuba ha vuelto al escenario internacional, donde piensa tomar partida activamente con la promoción intensiva a la inversión extranjera, tiene que ajustarse los cinturones y repensar el plano de los derechos de autor, identidad de marca, propiedad intelectual y tantos otros, que hasta el momento han sido pasados por alto para la conveniencia de instituciones tanto particulares como estatales.