José Manuel Ramos-Horta, quien fue representante permanente ante Naciones Unidas del Movimiento Independentista de Timor Leste y es considerado como la voz internacional por la independencia de su nación recibió, en 1996, el Premio Nobel de la Paz.
En su condición de Nobel de la Paz, Ramos-Horta tiene el derecho de hacer propuestas para optar por esta distinción y, ha considerado que nadie merece más optar por el Nobel de la Paz que el Contingente Internacional de Médicos Especializados en Situaciones de Desastres y Graves Epidemias de Cuba (Brigada Henry Reeve).
Así lo hizo saber el pasado 19 en conferencia dictada en La Habana, a propósito del X Congreso Internacional Universidad 2016
La solidaria y trascendente labor de los cooperantes cubanos, tanto en situaciones de desastres naturales como terremotos, inundaciones o tsunamis como ante brotes de epidemias de cólera o ébola, justifican la propuesta de reconocimiento a los médicos, enfermeros y técnicos cubanos que desde el año 1961, -cuando surgió la brigada y fueron enviados los primeros médicos cubanos a Angola-, han prestado sus servicios en países como Chile, Pakistán, Guatemala, Haití, entre otros.
No es esta, sin embargo, la primera ocasión en que el colectivo ha sido propuesto como candidato al Nobel de la paz, pues en el año 2015 la conferencia anual de sindicalistas noruegos aprobó por unanimidad similar propuesta.
La brigada está conformada por miles de galenos cubanos, especializados en Medicina General Integral, Psiquiatría, Cardiología, Cirugía, Pediatría, Gastroenterología, y Epidemiología.
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