El presidente de los Estados Unidos, Barack Obama, no deja de superar las expectativas que se hilvanaron al anuncio de su visita. Para sellar con broche de oro el primer día de su histórico arribo a la isla, Obama decidió probar de primera mano los sabores de la auténtica cocina cubana en una de las famosas paladares de La Habana.
En compañía de la Primera Dama Michelle y sus hijas Sasha y Malia, el mandatario norteamericano cenó en la conocida paladar San Cristóbal, enclavada en el corazón de Centro Habana, mientras un público expectante de decenas de personas se agolpaba afuera para saludarlo.
San Cristóbal, ubicada en la concurrida calle San Rafael entre Lealtad y Campanario, es uno de los restaurantes más distinguidos de la capital y ha trascendido como uno de los mejores sitios gastronómicos de La Habana para diversos rankings de medios especializados.
El presidente estadounidense ha cumplido una intensa y amplia agenda desde la tarde de este domingo, cuando aterrizó en el Aeropuerto Internacional José Martí.
Hasta el momento, ha visitado zonas de interés del Casco Histórico de la ciudad y la recién inaugurada Embajada de EE.UU en Cuba.
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