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Chapman podría jugar por Estados Unidos en el Clásico Mundial de Béisbol

La política de rechazo de los peloteros cubanos emigrados podría conducir a su pérdida definitiva para nuestro béisbol, como es el caso de Chapman, quien está dispuesto a jugar por Estados Unidos.

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Este artículo es de hace 7 años

La política de rechazo de los peloteros cubanos emigrados podría conducir a su pérdida definitiva para nuestro béisbol, como es el caso de Chapman, quien está dispuesto a jugar por Estados Unidos.

Quizás no haya que darle mucho crédito a las declaraciones recientes del presidente del INDER, Antonio Becali, quien se opuso a la posibilidad de que los peloteros cubanos que se han ido del país y no jueguen en la Serie Nacional puedan integrar el equipo que nos representará en el Clásico Mundial de Béisbol de 2017. Todo apuntaba (y de hecho sigue apuntando) a la creación de un equipo unificado por dos razones elementales e inapelables: son cubanos y muchos de ellos son mejores que los peloteros que quedan en la isla.

Y creo que no hay que darle crédito, porque como ha pasado ya tantas veces, es probable que el INDER se desdiga de aquí a 2017 y todos los cubanos de dentro y fuera, tal como tienen derecho, puedan ser elegibles para el equipo unificado.

Sin embargo, nada garantiza que los que están fuera no escojan caminos distintos y prefieran jugar por otros países, como respuesta al desaire de que están siendo objeto ahora mismo.

Tal es el caso de Aroldis Chapman, quien recibió el 29 de marzo la ciudadanía estadounidense, lo que le da derecho a integrar la nómina del equipo nacional de ese país.

Preguntado sobre los comentarios del presidente del INDER, Chapman aseguró que: “Yo soy ciudadano, ¡puedo jugar para el equipo de Estados Unidos!”. Y agregó "Sí me invitan yo voy y participo” como “cerrador o en el bullpen, a tirar el siete o el ocho... cualquiera”.

Ya no se trata de que hayan limitado durante años las posibilidades del béisbol cubano prohibiéndoles a unos y permitiéndoles a otros competir por el país que los vio nacer. Ya no se trata tampoco de que le nieguen a la afición cubana el derecho de ver ganar a su selección nacional.

Ahora se trata de algo más terrible, de que los peloteros cubanos pierdan la esperanza de representar a su país, algo que, a juzgar por las declaraciones que ellos mismos hacen cada vez que tienen la oportunidad, era lo único que quedaba intacto.

(Imagen tomada de www.beisbologo.com)

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