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La "lista negra” no afectará a teléfonos importados, explica trabajadora de ETECSA

Según reporta Diario de Cuba, la temida "lista negra" de teléfonos celulares que se anunciara por parte de ETECSA hace unos días, no afecta a teléfonos importados o desbloqueados, sino a "aparatos" que se hayan declarado previamente como robados o extraviados.

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Este artículo es de hace 7 años

Unos días atrás la estatal ETECSA ―la Empresa Estatal de Telecomunicaciones de Cuba― puso en marcha un grupo de medidas que, aunque a priori tienen el propósito expreso de "proteger a la población", han empezado a preocupar a muchos en la Isla.

La frase "lista negra", empleada en el anuncio oficial, comienza a asustar a los dueños de teléfonos que no han sido comprados a ETECSA, sino importados al país por terceros, motivo por el cual los actuales "dueños" no tienen documentos de propiedad a su nombre.

La realidad indica que es elevadísima la cifra de cubanos que tienen teléfonos que no han comprado a ETECSA, ni que tampoco han sido adquiridos “por la izquierda” en la Isla, sino que los han recibido como “regalo” por parte de familiares, amigos o incluso los han encargado para que se los compraran fuera del país, aunque ellos dieran el dinero a alguien para la transacción.

En algunos casos, esos cubanos se han visto obligados a desbloquearlos “por fuera”, pues es un servicio que ofrecen algunos particulares en la Isla, pero no ETECSA. La "legalidad" de este tipo de servicio queda en duda, y es por ello que no pocos están nerviosos.

Cuando la preocupación ya empezaba a crecer entre el grupo de personas que se encuentran esta situación, Diario de Cuba ha informado hoy que una funcionaria de ETECSA, encargada de la venta de líneas móviles y de atención al cliente, ha asegurado que:

La medida no es para teléfonos importados o desbloqueados.

Y añade:

Es para detener la venta de teléfonos robados que al parecer se ha incrementado en los últimos tiempos.

Según la funcionaria, los teléfonos que entrarán en la temida “lista negra”, serán aquellos que hayan sido reportados previamente por sus dueños como robados o extraviados.

Por ello insiste en algo que se ha venido reiterando por diversas vías en los últimos días:

Cada usuario debe conocer el IMEI de su teléfono.

Y precisa:

Si lo pierde o se lo roban, entonces lo reporta y nosotros lo ponemos en la lista.

Luego, cuando se introduce una nueva línea en el teléfono (que ha sido robado o perdido), de inmediato queda desactivada al reconocer ETECSA el IMEI que se ha reportado previamente por el afectado de robo o extravío.

En esos casos en que se descubra un aparato que ha sido reportado previamente:

El usuario de la línea tiene cinco días para acercarse a ETECSA y entregar el teléfono reportado.

informa la funcionaria.

Si no lo hace, su línea será desactivada definitivamente y tendrá que comprar otra nueva y ponerla en un teléfono legal.

Sin embargo, a pesar de estas aclaraciones, muchos cubanos siguen temiendo que en realidad el fin último de ETECSA con estas nuevas medidas sea forzar la compra de sus propios aparatos (los que vende ETECSA a la población), que muchos consideran excesivamente caros.

Habrá que esperar y ver cómo cómo se desenvuelve la puesta en práctica de las medidas anunciadas. Por lo pronto, en apenas 48 horas de funcionamiento, a finales de la semana pasada ya ETECSA declaraba que había encontrado más de 600 teléfonos cuyo IMEI no era válido.

Vale recordar que, para conocer previamente su IMEI y tenerlo ya anotado en caso de pérdida y/o robo, el usuario puede marcar en su celular *#06#, y en instantes verá en pantalla la numeración del código IMEI.

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Judith Moris

Redactora en CiberCuba. Licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de La Habana, y Máster por la Universidad Autónoma de Barcelona. Ha sido profesora en la UH e investigadora en la UAB, y redactora/editora de la editorial Teide


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Judith Moris

Redactora en CiberCuba. Licenciada en Filología Hispánica por la Universidad de La Habana, y Máster por la Universidad Autónoma de Barcelona. Ha sido profesora en la UH e investigadora en la UAB, y redactora/editora de la editorial Teide