Según el periodista Antonio Enrique González Rojas, en el sitio web institucional de la Escuela Internacional de Cine y TV, en San Antonio de los Baños, la célebre Sigourney Weaver llegó a la Escuela rodeada de profesionales de la música que, durante alrededor de una semana repasaron tomaron parte en el Cubadisco.
El grupo de personalidades del arte, investigadores profesionales, actores, músicos y archivistas estuvieron en el Cubadisco, gracias a Ed Steinberg, para escuchar a músicos como Roberto Carcasés, Alejandro Delgado, Telmary, El Canario y Maraca. El grupo visitó estudios, escuelas de arte, porque según dijeron “hemos venido a aprender de su cultura. Todos los estadounidenses vendrán acá, nosotros solo hemos llegado antes”.
Respecto al cine industrial norteamericano y sus políticas, la Weaver aseguró que invierte muy poco tiempo preocupándose por Hollywood: “Son personas de negocios, no están interesados en la justicia social. Muchas veces leo un guion y digo: yo debería estar haciendo este papel de hombre. Siento que si bien Hollywood paga el dinero, depende de nosotras las mujeres tomar todas las decisiones importantes. Nos toca a las mujeres crear en el cine un mundo que se parezca al nuestro: diverso. Y creo que ustedes están en un gran momento, pues Cuba es el futuro pues es diversa. Los hombres y las mujeres tienen espíritus fuertes, y yo veo un gran amor entre ustedes, y aceptación. En los Estados Unidos tenemos mucho que aprender de su espíritu, y necesitamos que su espíritu venga a nuestro mundo fílmico, que traiga ese tipo de liberación”.
Sobre sus preferencias cinematográficas la Weaver, que apareció en Cuba haciendo gala de feminismo y posiciones bastante radicales, aseguró que le han encantado dos filmes de dos mujeres realizadoras: Mustang y La ciénaga, que catalogó como películas poderosas y memorables, aunque difíciles de encontrar en los cines de Norteamérica, monopolizados por los efectos visuales.
Para seleccionar un papel, según contó la Weaver a los estudiantes de la Escuela de cine, solo le importa que la película sea sobre algo más que los personajes. Y su única preocupación es que el cineasta piense que no necesita ser dirigida, puesto que ella siempre necesita del diálogo con el director.
“Con la eclosión de medios en Estados Unidos, tenemos muchas maneras de ver un filme. Ahí está Netflix. De la misma manera tenemos formas distintas de hacer filmes. Los públicos tienen mucho apetito por material original. Quieren ver Transformers, o lo que sea, pero tienen muchos deseos de ver grandes historias. Siempre hay esperanzas. Hay estudios inteligentes y le darán dinero a los cineastas para hacer mejores historias”, dictaminó optimista la Weaver.
La actriz de Alien y Avatar, The Year of Living Dangerously y Gorilas en la niebla, Working Girl y La muerte y la doncella, The Ice Storm y A Map of the World, entre muchas otras memorables, visitó la Escuela poco antes del mediodía y tuvo un encuentro con estudiantes, profesores y trabajadores en la sala Glauber Rocha.
(Imágenes tomadas del sitio eictv. org)
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