Con jonrón decisivo de Keston Hiura en el octavo capítulo, Estados Unidos completó la remontada en el quinto y decisivo choque frente a Cuba, para asegurar el duelo amistoso con su tercera victoria.
Por primera vez en este tope que comenzó el pasado 23 de julio el equipo cubano lució bien a la ofensiva, o para ser exacto, lo hizo en los 4 primeros episodios, en los que bateó 9 indiscutibles, 3 de ellos de Yolbert Sánchez. Sin embargo, el nuevo ímpetu mostrado solo se tradujo en una anotación, impulsada precisamente por Yolbert, pobreza productiva que se debió, por un lado, a deficiencias en el corrido de las bases, y por otro, al resguardo de la tropa visitante, que volvió a mostrar una defensiva de gran calidad.
Más nada pudo hacer Cuba gracias al excelente relevo del zurdo Ricky Tyler Thomas, quien cargó con su equipo desde el cuarto inning hasta el final del choque, permitiendo solo par de hits y ponchando a 4.
Esa única carrera cubana fue protegida por Miguel Lahera, quien fue colocado como abridor, en un intento desesperado de la dirección del equipo por ganar el quinto y decisivo choque con un lanzador seguro.
Aparentemente el Cuba había logrado establecer la especialización en su picheo desde la estancia en la Liga Can-Am, pues nuestros técnicos habían comprendido finalmente que los lanzadores resultan más productivos cuando se categorizan según sus características y las necesidades del equipo en cada momento del juego de pelota.
Sin embargo, la especialización en la selección nacional ha demostrado ser solo una buena intención que dura mientras no llega los momentos difíciles, justamente esos en los que más falta hacen los pitchers especializados, y se decanta entonces por el lanzador que más confianza dé, echando por tierra meses de preparación, estrategias elementales de juego y todos los resultados previos.
Lahera no lo hizo mal (no permitió hits ni carreras), pero se hizo notable como a medida que avanzaba el juego disminuía su efectividad y su control.
La sexta entrada fue abierta por Frank Medina, quien fue mal recibido por la batería norteña, que le marcó el empate a una carrera antes de ser frenada por Liván Moinello.
A pesar del exceso de trabajo que ha tenido Moinello en estos días, logró tirar los 4 capítulos finales del choque, aunque no pudo evitar el jonrón de Hiura en el octavo, que le dio la victoria a su equipo 2 carreras 1.
En total, los visitantes batearon solo 3 hits, por 11 los cubanos, con destaque para el joven Yolbert Sánchez, quien en su primer partido como regular en el Cuba disparó 3 hits en 5 turnos y empujó la única anotación cubana, en función de primer bate. William Saavedra y Yosvani Alarcón batearon 2 sencillos cada uno en 4 oportunidades.
Cuba ganó los choque primero y tercero con marcadores de 3-1 y 5-1, mientras Estados Unidos salió airoso en el segundo y el cuarto, 1-0 y 4-1.
Fue este el segundo tope consecutivo ganado por los norteños, también con tres victorias. Tras su reanudación en 2012, Cuba ganó por 3-2, recibió barrida en 2013 y la devolvió en 2014, por lo que el registro global favorece ahora enteramente a Estados Unidos, con 3 ediciones ganadas con 2 perdidas, y 13 victorias por 12 derrotas.
(Imagen tomada de www.trabajadores.cu)
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