La reacción de la oposición en Venezuela después de la amenaza de Nicolás Maduro no se ha hecho esperar y ha exigido la puesta en marcha de un referéndum revocatorio contra el dirigente chavista antes de que finalice 2016, según recogió Martí Noticias.
Este movimiento llega horas después que Maduro amenazara con arrestar a más personas de las que detuvo Erdogan en Turquía tras el fallido golpe de estado.
En un comunicado la coalición opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) recordó al gobierno venezolano que la solución a la crisis del país pasa por el proceso revocatorio, al mismo tiempo que repitió su convocatoria para la concentración del próximo 1 de septiembre en la que se pedirá una fecha concreta para la recogida de firmas del revocatorio.
"El diálogo demandado es nacional y para serlo hay que escuchar al pueblo, y el pueblo lo que pide es respeto a la Constitución, vale decir, acatamiento de su decisión de ir a un innegociable referendo revocatorio a celebrarse este año 2016", reivindicaron desde la oposición.
En la disidencia de Venezuela todavía levanta ampollas la comunicación de la presidenta del Consejo Nacional Electoral (CNE), Tibisay Lucena, el pasado 9 de agosto, cuando anunció que la recogida de los cuatro millones de firmas necesarias para convocar el referéndum se producirá a finales de octubre, lo que complica que el proceso se complete en 2016.
Según la citada publicación, la MUD recordó a los dirigentes del país el derecho de manifestación de los ciudadanos y detalló que "ningún diálogo puede prosperar si no hay igualdad de condiciones entre las partes o no existe predisposición a encontrar soluciones".
Retraso de 76 días para responder al inicio del revocatorio
Desde la Mesa de la Unidad Democrática censuraron la actitud del Consejo Nacional Electoral, al que acusan de retrasar en 76 días su contestación a las gestiones que se iniciaron en mayo para poner en marcha el revocatorio.
La disidencia del país chavista pretende que el referéndum se haga antes del 10 de enero de 2017, ya que, en ese caso, si Maduro lo pierde estaría obligado a convocar elecciones. Si se hace después el presidente es revocado, pero es sustituido por un vicepresidente.
(Imagen de archivo).
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