Partidarios del Ku Klux Klan planean efectuar una marcha en Carolina del Norte para festejar el triunfo de Donald Trump, próximo presidente de los Estados Unidos,
Precisamente allí, en North Carolina, Donald Trump derrotó a Hillary Clinton y se alzó con los 15 votos electorales en disputa, tras haber sido respaldado por 2 milllones 339 mil 603 votantes.
A pesar del júbilo plasmado por David Duke, ex líder del KKK en su cuenta de Twitter, uno de los portavoces de Trump dijo que tanto este como todo su equipo "repudian a esos grupos e individuos y condenan su mensaje de odio".
Precisamente Duke, a través de su cuenta en la red social ya mencionada, expresó hace unas horas que la noche del 8 de noviembre había sido "una de las noches más emocionantes de mi vida", al tiempo que insistía ante la opinión pública que "nuestro pueblo" -refiriéndose a los "hombres blancos" que predican la ideología racista del KKK- ha jugado un papel importante en la victoria.
También Duke agradeció en Twitter a Julian Assange y a Wikileaks por el papel jugado en las elecciones del pasado 8 de noviembre.
El evento ha sido organizado por The Pelham, un grupo local de North Carolina que se hacen llamar los Leales Caballeros Blancos del Ku Klux Klan.
En el sitio web de estos se pueden apreciar consignas partidarias a Trump, al cual se le identifica como "el pueblo", "mi raza" y se le llama "Presidente de los Estados Unidos".
El Ku Klux Klan es una organización que basa su credo en "la purificación de los Estados Unidos", considerando al hombre blanco como "puro" y "superior".
En los años 1920 a 1930 llegó a contar con más de 4 millones de simpatizantes, para luego con el transcurso de los años tener recaídas y resurgimientos, el último de ellos en la década del 50 y 60 del pasado siglo.
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